En el que podemos llamar el movimiento del año en el mundo de las telecomunicaciones, el operador estadounidense AT&T ha anunciado la compra de T-Mobile a Deutsche Telekom por la tremenda cantidad de 39 mil millones de dólares, dando paso así a lo que será el operador estadounidense más grande.
Gracias a esta compra, AT&T aumenta el espectro 4G LTE que le fue concedido y podrá llegar a 46 millones de personas más, es decir, al 95% de Estados Unidos. Con esta compra AT&T también se hace de la red HSPA+ más grande de ese país y aumenta su número de torres celulares que, de no ser por esta transacción, le hubiera tomado 5 años construirlas a AT&T.
Como siempre, los que terminarán perdiendo son los mismos usuarios. Con menos competencia y una base de usuarios mayor, AT&T puede darse el lujo de ajustar los precios a su conveniencia, además de que tras esta compra de convertirá en el único operador GSM de Estados Unidos. Otra consecuencia directa de este movimiento es que veremos menos diversidad de smartphones en el mercado.
¿Y esto afectará en México? Sí, y especialmente a Nextel. Como ya te comentamos, Nextel decidió por fin convertir su red del arcaico estándar iDEN a GSM 3G, y para ello utilizará la misma frecuencia de T-Mobile para los datos 3G. Y como curiosidad, T-Mobile es el único operador en el mundo en utilizar dicha frencuencia, es decir, los smartphones de T-Mobile sólo tienen conectividad 3G bajo la red de T-Mobile, y nada más. Al utilizar Nextel la misma frecuencia 3G que T-Mobile, los smartphones de T-Mobile en teoría podrían ser traídos a Nextel y tener conectividad 3G. Ahora, tras la compra de T-Mobile por AT&T dudo que en el futuro los fabricantes lancen nuevos smartphones que utilicen la frecuencia 3G de T-Mobile y por lo tanto Nextel caería en el mismo problema que tiene ahora, no habrán muchos smartphones que puedan operar bajo su red.