La batalla entre Sony y Microsoft cada vez se pone más intensa, esto después de que el gigante de Redmond intentó adquirir Activision Blizzard, una transacción que no está aprobada por los organismos reguladores, pero que el proceso continúa.
Esta semana se descubrió que la compañía japonesa fue responsable directa de evitar que cuatro juegos importantes se lanzaran en Xbox. Esto por supuesto ha provocado múltiples críticas a Sony, sobre todo fans de la consola de Microsoft han marcado su descontento con la acción de la empresa de PlayStation.
Una de las principales causas de esta acción por parte de Sony es para tratar en gran medida evitar que Microsoft compre Activision Blizzard y, por ende, Call of Duty se vuelva un juego exclusivo de Xbox.
Si esto llega a pasar la hegemonía de PlayStation podría verse mermada a nivel mundial, recordemos que la franquicia de este juego es una de las más rentables, y con ello todo lo que implican ingresos y demás factores pasarían a manos de Microsoft, esto lo quiere evitar Sony a toda costa.
Los juegos bloqueados por Sony para que no lleguen a las consolas Xbox son Final Fantasy VII Remake de Square Enix, Bloodborne de From Software, Final Fantasy XVI de Square Enix y Silent Hill 2 de Bloober Team.
Hasta el momento ninguno de los estudios antes mencionados se han pronunciado al respecto sobre el bloqueo permanente de juegos en Xbox. Estas son acciones donde los únicos afectados serán los jugadores.