Movimiento popularizado por Gary Wolf y Kevin Kelly en la revista Wired en 2007, y en Ted Talks un poco después.
Este movimiento surge con la necesidad de conocer más de nosotros mismos e intenta ayudarnos a realizar dicha tarea, siendo una de las tendencias más interesantes de la tecnología.
El “yo cuantificado” consiste en medir y recopilar información de ti mismo sea cual sea el uso de la misma (perder peso, correr una distancia mayor, crear músculo, controlar niveles de azúcar, etcétera). Personalmente considero que este movimiento surgió con la necesidad de ayudar a personas a bajar de peso, y poco a poco se fue extendiendo hasta alcanzar también otros sectores. Actualmente existen una infinidad de dispositivos que nos permiten obtener datos de nosotros mismos (temperatura, presión, calorías ingeridas, calorías gastadas, nivel de azúcar, cantidad de tiempo que descansamos, etcétera), datos que posteriormente podemos analizar con otro dispositivo. Logrando de esta forma conocernos mejor, alcanzar nuestras metas, mantenernos saludables, entre otros.
Considero que es una tendencia muy interesante, aunque algo cara, y por supuesto para aquellos fanáticos del espionaje; demasiado invasiva y peligrosa.
Los componentes básicos de esta tecnología son:
- Sensores y sistemas de recopilación de datos sobre el estado físico de una persona: sistemas de geolocalización, podómetros (cuentapasos), básculas, sensores de temperatura corporal, tensión y ritmo cardíaco, analizadores de glucosa, oxígeno en sangre, azúcar (importante para los diabéticos), masa corporal y grasa, sueño o actividad deportiva. Algunos de estos dispositivos requieren la entrada manual de datos, mientras que otros son un poco invasivos.
- Sensores y sistemas de recopilación de datos sobre el entorno: temperatura exterior, humedad, altitud (algunos dispositivos incorporan ya altímetros), contaminación (CO2), presencia de polen en el ambiente, transporte o viajes.
- Sucesos registrables relacionados con nuestro entorno: aunque es similar al punto anterior, en este rubro entran; captura de vídeo y fotografías, registro de llamadas de móvil, seguimiento del uso de aplicaciones, gastos y finanzas personales, compras, consumo de energía en el hogar, sitios web por los que navegamos, etcétera.
- Búsqueda del lado psicológico y espiritual: esto incluye tomar notas sobre estados de ánimo, hábitos, felicidad, logros, inspiración, gratitud, espiritualidad, compromiso, etcétera.
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Y por si les quedaba alguna duda acerca de cómo sería un día si lo quisieran cuantificar casi por completo, les dejo la siguiente narración:
Despiertas y un dispositivo monitoreó tus movimientos para conocer las horas de sueño profundo que tuviste, te pesas en una báscula WiFi, mides tu presión arterial, niveles de glucosa, lo dejamos a tu gusto. Después de colocarte algún dispositivo todos tus movimientos quedarán registrados (pasos, kilómetros recorridos, etcétera). Cada alimento que se ingiere pasa a una base de datos: agua, desayuno, comida, merienda… La mayor parte de los servicios de registro cuantificado proporcionan listas enormes de alimentos ya predefinidos, junto con toda su información conocida: calorías, grasa, sodio, calcio y resto de componentes. Si estás enfermo puedes introducir las dosis de medicamento que te encuentras tomando. En el trabajo diario, la mayor parte de los servicios guardan un registro completo de la actividad. A lo largo del día, cualquier foto o vídeo que tomes queda marcada con un timestam. Por la noche transmites inalámbricamente toda la información almacenada en tu(s) dispositivo(s) a la nube: datos vitales, contenidos generados en forma de fotos o vídeos, compras: 24 horas más de datos acumulados, 24 horas más de vida transformada en bits.
Una vez presentada esta tendencia: ¿qué piensan de ella?, ¿ustedes cuentan con alguno de estos dispositivos?
Vía: Microsiervos.
