Hará ya casi 3 años que vimos aparecer, de la mano de Steve Jobs, el primer iPhone, un revolucionario móvil que se alejaba totalmente de los móviles que por aquél entonces había que no tenía nada que ver con los aberrantes conceptos que aparecieron por internet.
El iPhone era uno de los primero móviles sin teclado, con pantalla multitáctil, con gestos multitáctiles que no sólo incorporaba Google Maps o Google, sino que tenía un navegador móvil que hasta entonces no se había visto. La rapidez y la fluidez con la que funcionaba el iPhone era bastante asombrosa comparada con otros sistemas operativos móviles (Windows Mobile, Symbian, Palm…).
Sin embargo era un iPhone Simple, si cámara de vídeo, sin MMS (no muy utilizados en EEUU), sin conexiones de alta velocidad (bueno, media velocidad: 3G) y con un SO totalmente cerrado a desarrolladores. Fue un iPhone que pisó muy pocos países y que básicamente era un experimento de Apple. Se puede resumir en una frase: “haber qué puede pasar con este teléfono”.
Y Apple y Steve lo consiguieron. Millones de copias sucedieron al iPhone, muchas con MMS, otras con 3G, otras con pantalla táctil pero con teclado… En fin, una locura de copias que no llegaban al nivel del iPhone. Sin duda, el mayor competidor de Apple y del su Mac OS X iPhone, Microsoft con Windows Mobile no llegaba a alcanzar el rendimiento de este pequeño terminal.
Tras ver lo que otros podían hacer, los de Cupertino liberaron el iPhone 3G, con un diseño cambiado, con GPS pero sin cámara de vídeo, ni MMS ni un procesador mucho más potente. Esto se debe a que Apple volvía a experimentar con el público. “Ahora lanzamos un iPhone con algo más y lo pondremos a nivel mundial”.
Así se lanzó el 3G. Pero Apple no contaba con un potencial que ni ellos mismo eran capaces de ver: las App. Los desarrolladores “piratas” había jugueteado con el iPhone haciéndole el Jailbreak y permitiendo así MMS, cámara de vídeo, juegos, mejoras… Todo lo que Apple no quería darnos lo consiguió un grupo de desarrolladores que se divertían programando para el terminal.
Mucho más tarde Apple recapacitó y permitió App creando un SDK ( no con la solución cutre de las App Webs) y una política muy restrictiva a los desarrolladores con el fin de que creasen sus programas pero pasando por su mano y permitiendo usar el mínimo hardware posible, para no empeorar el SO.
No mucho después, Steve y los suyos comenzaron a liberar más el SDK (aunque sin relajar el proceso de aprobación de App) y vieron el gran potencial de las App en el iPhone: juegos (EA, Gameloft, etc.), aplicaciones, utilidades, radios, etc… Además nos dieron los MMS (un poco tarde ¿no?) y el Tethering (una compensación por la tarifa plana).
Finalmente Apple decidió mejorar su terminal y abandonar el iPhone Simply o el Simple vitaminado, para darnos un SmartPhone más completo, el 3Gs, rápido como el sólo y clarísimo competidor con los terminales HTC con Android (Google), Palm Pre con Web OS, o los terminales con Windows Mobile (aunque, bueno, Microsoft siempre está en otra liga). Así que, por un lado tenemos dos SO muy rápidos (Mac OS X iPhone y Android) aunque muy diferentes, siendo el segundo demasiado joven (gestos multitáctiles ya!!). Por otro lado tenemos el Web OS (no acaba de convencerme no sólo por lo poco rápido que funciona, sino por el terminal en sí, muy flojo aunque tenga pantalla multitáctil y Backgrounder) y Windows Mobile (y ya sabemos lo que pasa con Windows, funciona hasta que le metemos programas; además Microsoft ha estado ignorando mucho a su sistema móvil).
¿Con todo esto qué quiero decir? Pues simplemente, que pese a otros SO (aunque cuidado con Android..), a otros móviles algo más potentes, ninguno ha llegado al nivel del iPhone. Fue el primero, el más tecnológico y el que mejor relación Hardware – Software tiene. Y no precisamente hablamos de un cuestionamiento de FanBoy.. Dado que la riqueza de las plataformas es la explosión del desarrollo y vaya que Apple lo ha conseguido con su plataforma móvil.
Sin embargo, últimamente están lanzando terminales muy apetecibles por su Hardware (los HTC con Android son cada día mejor y en un futuro no dudo que lleguen a tener un terminal muy satisfactorio en todos los sentidos, como los recién presentados hace un par de semanas…).
O Palm Pre, bastante intuitivo SO pero con un Hardware que me hacer reír y es que probar un 3Gs y un Palm a la vez, es darte cuenta de quién va por buen camino y quien no..
Pero volviendo al 3GS, Apple evolucionó el 3G para poder aguantar las App, nos dio una cámara de vídeo y una de fotos de 3 mpx cuya lente sólo puedo decir que es asombrosa ( y es que todo no son megapíxeles), tuve la oportunidad de probar el 3GS con otros con mayor “pixelaje” y sin embargo tengo que decir que me ha asombrado la calidad del iPhone (al igual que de los iPod Nano).
Pese a todo, Apple no nos da lo que pedimos, no tenemos de descargas desde Safari (el mejor navegador móvil, pero incompleto), no tenemos un mini Finder, unos accesos directos como con SBSettings, o un sistema un poco más profesional, no sólo orientado a cualquier usuario, sino a los que necesitan más (información en la pantalla de desbloqueo, más control de los componentes del iPhone (RAM, Procesador, Temperaturas…), Backgrounder…
Aun pensado en todo esto, no me cabe la menor duda que Apple y Steve se van a quedar parados mientras HTC lanza un “pepinaco” o mientras Google le come terreno y es que si algo distingue a Apple del resto es que “la innovación distingue al líder del que le sigue” y Steve no es mucho de seguir a nadie, aunque también los de Cupertino son mucho “te lo podríamos dar pero vas a esperar, así ganamos más” (en parte como cualquier empresa).
Tras estas parrafadas lo que intento decir es que el próximo iPhone sin duda será un gran terminal, Apple ha comprado una empresa de procesadores, una de mapas y está probando la potencia gráfica en los iPod Touch (muy buena, por cierto). Por eso, y pese a vuestras futuras críticas (las que espero leer y respetar) creo que el próximo iPhone será el iPhone Pro, un serio competidor de los actuales SmartPhones y es que si algo caracteriza a Apple (y a Google) es que nada es nunca los suficientemente rápido y potente para ellos.
Tomado de Actualidad iPhone