En 2020, las compras en línea se convirtieron en algo esencial para todos los consumidores. Muchos descubrieron que ir a comprar a la tienda de la plaza no era la única opción, y también lo podían hacer desde casa, de manera más segura y eficiente. Dada la situación que se vive actualmente en el mundo, los comercios a nivel global están pasando por un proceso de evolución en la forma de ofrecer sus productos.
Tanto comercios como los compradores deben evolucionar al mismo ritmo, por lo que las empresas requieren ofrecer obligatoriamente una experiencia mucho más cómoda, segura y fácil, de lo contrario las personas tendrán una mala compra y tendrán que regresar a lo cotidiano; las compras físicas, que, si bien no es malo debido a que se toma como una forma de distraerse, las compras en línea tienen muchos beneficios, por lo que las empresas deben seguir mejorando para atraer a los consumidores.
Para conseguir dicho objetivo y lograr la satisfacción de los clientes, cada comercio puede ayudarse de varias herramientas como los datos biométricos de los compradores, que ayudarán a blindar las transacciones mitigando el riesgo de fraude, reducir los contra cargos y simplificar el proceso de pago. Por supuesto, será más fácil y eficiente pagar con tu huella digital que con la tarjeta débito, el objetivo es reemplazar el método de pago y reemplazar a las contraseñas tradicionales.
Los consumidores pueden ir a su tienda favorita y pagar utilizando su huella digital, el iris, a través de reconocimiento fácil o con los comandos de voz. En México esta tecnología se está adoptando poco a poco y no es indiferente para los usuarios, de hecho, datos recopilados por Deloitte, indican que el 78 por ciento de las personas están dispuestos a compartir sus datos biométricos con las empresas, y el 52 por ciento dice preferir el uso de su huella dactilar para iniciar sesión en servicios o aplicaciones móviles.
Hay muchos beneficios en la adopción de los datos biométricos como forma de pago principal en comercios, establecimientos y tiendas en línea. Uno de los más importantes es la seguridad, ya que este método se ha posicionado como uno de los niveles de autenticación más inquebrantables hoy en día y evitan que el cliente deba memorizar contraseñas o los famosos números PIN para tener acceso a los datos bancarios.
No hay duda de que los datos biométricos serán, en un futuro, los medios de pagos por defecto en la mayoría de los comercios tanto en físico como en línea, por lo que las empresas están a tiempo de ofrecer distintas herramientas y tecnología para conseguir esa satisfacción que en unos cuantos años será muy demandada.