La fragmentación tecnológica siempre ha existido y se presenta en todos los ángulos de la tecnología. En el caso de la tecnología móvil podemos observar este fenómeno en la diferencia de sistemas operativos, de dispositivos, y de arquitecturas. Toda esta diversidad crea un verdadero reto para los desarrolladores de aplicaciones.
En el ámbito del sistema operativo hay que reconocer que la fragmentación ha disminuido ya que hay menos sistemas operativos, aunque la separación entre ellos es más marcada, sin embargo plataformas como HTML 5 pretenden ayudar a unificar (aunque no es la solución a nuestros problemas). Sin embargo otro aspecto a cuidar además del desarrollo de una aplicación es la comercialización de la misma, ya no basta con crear una excelente aplicación, hay que publicitarla correctamente (y va de nuevo) fragmentando los mercados para enfocarse en el correcto. Esta comercialización ha sido casi nula hasta ahora, los desarrolladores de aplicaciones encontrarán un nicho amplio para desenvolverse, y quienes comiencen realizando esta tarea seguramente aventajaran a sus competidores independientemente de la calidad de su aplicación.
En cada uno de estos ambientes operativos se está haciendo mucho por permitir que las características únicas de un dispositivo no limiten su ecosistema. Quizás habrá que seguir distinguiendo entre una tableta y un smartphone, pero hacer que las aplicaciones funcionen en ambos tipos de dispositivos es el objetivo de los proveedores de sistemas operativos.
Realmente es una cuestión de en cuántas plataformas se enfocarán los desarrolladores para tener acceso a los canales de mercado correctos. Si una plataforma ofrece oportunidades de monetización viables para los desarrolladores, entonces harán sus desarrollos sobre ella. Los retos de descubrimiento y monetización por lo general son el siguiente paso después de la fragmentación, cuando la gente habla de los retos de los desarrolladores en la tecnología móvil.
La tecnología móvil ha madurado; ahora los desarrolladores necesitan habilidades adicionales. Ya no es suficiente un diseño de aplicación brillante o una codificación increíble. El éxito empresarial en un mundo de plataformas cruzadas significa operar un negocio de la forma en que un negocio debe operar en los mercados maduros. Ahora hay que implementar las reglas del negocio ordinario.
Vía: FastCompany.
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