iPhone X se convirtió en el smartphone del cual todo el mundo se encuentra hablando por ser el primer smartphone de Apple en recibir un rediseño importante desde la primera generación al apostar por un diseño sin marcos con una pantalla que abarca todo el frontal y suprime la presencia del Touch ID, siendo reemplazado por el Face ID, cuya presentación inicial tuvo un problema.
Ahora tenemos la novedad de que Apple redujo al 50% la producción del iPhone X, lo cual aparentemente podría traer consecuencias para la compañía, pero se desconocían las causas exactas del problema, pero ahora el Wall Street Journal está revelando una de las posibles causas.
Face ID es parcialmente la responsable de este problema, pues detrás de este método de autenticación se encuentra la tecnología Truedepth compuesta por lo sensores encargados del reconocimiento facial en 3D.
Exactamente el problema reside en que este módulo de sensores se encuentra dividido en dos partes denominadas “Romeo y Julieta”, la primera es la encargada de la proyección de los puntos infrarrojos que permiten detectar la profundidad y el mapeo de nuestro rostro, mientras la segunda simplemente lee el patrón de puntos del primero.
Ahora, el problema está en el primer juego de sensores que es bastante difícil de ensamblar en comparación con el segunda, lo cual está tomando más tiempo del necesario y provocando un retraso en la producción en serie del dispositivo.
Así que existe la pequeña posibilidad de un bajo número de unidades disponibles cuando el iPhone X llegue oficialmente al mercado en noviembre próximo, una situación complicada para Apple cuando están esperando aproximadamente 50 millones de pedidos una vez iniciada la preventa.
Hasta el momento Apple no ha emitido ninguna información, pero es bastante probable que el lanzamiento del iPhone X se pudiera retrasar hasta finales de noviembre para dar abasto con la producción a la demanda que tendría este dispositivo de gama premium.
Con información de WSJ