Desde el siete de julio Samsung lanzó a la venta en Corea del Sur la versión Fan Edition del Galaxy Note 7, el cual ha sido todo un éxito, al grado que la primera remesa compuesta por 400,000 unidades se ha agotado.
A pesar de que sacar una segunda sería lo ideal para los usuarios locales, la coreana ha decidido que no lo hará y en su lugar prepararía unidades para ser vendidas en otros países.
Los colores negro y azul coral son sumamente populares, motivo por el cual se gastaron, a pesar de que se vendió a $610 dólares, un precio que significa un descuento respecto al original.
La disponibilidad del modelo internacional sería a finales de mes pero sin indicar los países en dónde se venderá también en edición limitada, por lo que se cree que no se van a usar los dos millones de unidades restantes que fácilmente podrían ser lanzadas con este modelo, pero la marca no desea perjudicar las ventas del Note 8 que pronto será lanzado.
Con información de The Investor, Korea Times