Hace una semana Samsung anunciaba que gracias a las divisiones de chips y pantallas, el desastre del Note 7 no les afectaría. No contaban con tener que parar definitivamente con la producción de la phablet y tener que cambiar las cifras de las expectativas para el tercer trimestre.
Todavía no hay cifras oficiales del costo económico de parar la producción así como de saber las consecuencias en otros aspectos, pero la cantidad estimada en pérdidas asciende a dos mil millones 400 mil dólares, lo que ha hecho que se recorte a un tercio la cantidad pronosticada de ingresos y ganancias.
Se creía que tendrían ingresos serían de $43 millones 600 mil dólares y ahora se estima que serán de 41 millones 800 mil dólares. Las ganancias se estimaban en siete mil millones de dólares, las cuales ahora serían de $4 mil millones 600 mil dólares.
El reporte final se dará a conocer a final de este mes. Con esto sin duda, el cuarto trimestre del año será inferior, excepto que logren colocar rápidamente al S7 del cual han aumentado la producción esperando que los usuarios reemplacen al Note con este modelo.
Con información de Samsung y Bloomberg
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