Poco a poco la cantidad de filtraciones alrededor del nuevo flagship de Motorola, el Moto X (2015), se han incrementado y si bien anteriores rumores apuntaban a la integración de un Snapdragon 808, ahora nueva información apunta en otra dirección.
De acuerdo con el reporte de esta ocasión, el Snapdragon 808, integrado también en el LG G4, sería sustituido por su hermano mayor el Snapdragon 810, posicionándose de esta manera como otro de los terminales más poderosos del mercado, aunque posiblemente también integre los problemas de sobrecalentamiento que han menguado la fama de tal chipset.
Entre sus demás especificaciones se encuentran una pantalla de 5.2 pulgadas con resolución QHD, 4 GB de RAM, capacidad de almacenamiento interno de 32 o 64 GB, cámara principal de 16 Mpx, cámara frontal de 5 Mpx y una gran batería de 3,280 mAh. Se espera su presentación en algún punto entre los meses de agosto y septiembre, justo como sucedió el año pasado.
¿Sería acertada la decisión de Motorola de integrar el SD810 en su flagship? Personalmente pienso que no, ya que sería mejor optar po un chipset de menor potencia, pero igualmente capaz, a integrar el tope de gama y tener que lidiar con problemas de desempeño que en primera instancia no deberían existir.
Con información de Phone Arena
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