Samsung está preparando un nuevo flagship para el 2016, pero no llegaría como un único modelo, sino que la surcoreana estaría preparando varios dispositivos, pues el próximo año verían la luz el Galaxy S7 y Galaxy S7 Edge con pantalla de 5.2 pulgadas, y estarían acompañados del Galaxy S7+ y Galaxy S7+ con pantalla de 5.5 o 5.7 pulgadas.
Este grupo de dispositivos montaría un procesador Exynos 8890 o un Snapdragon 820, ofreciendo un amplio poder de procesamiento para ofrecer la mejor experiencia de usuario. Mientras tanto, el diseño sería similar a lo visto en el Galaxy S6 con únicamente algunos cambios menores, según algunos renders filtrados en las últimas horas.
De acuerdo con un reporte, la producción del nuevo flagship de Samsung iniciaría en febrero con un inventario inicial de cinco millones de unidades, de las cuales 3.3 millones serían del Galaxy S7 y 1.7 millones corresponderían al Galaxy S7 Edge, Galaxy S7 Plus y Galaxy S7 Edge Plus.
Con información de ET News, GsmArena
