Una de las partes mas molestas de Android, es cuando la actualización no llega a tu equipo. Ya sea porque la marca decide no liberar la actualización o porque el operador es quien decide que sólo algunos modelos podrán tenerla. Excepto que seas un experto en hacer la actualización por tu cuenta, el resto de los usuarios nos quedamos a la deriva sin tener las nuevas versiones, pero ahora más que nunca, es cuando más se requiere que esa actualización sea Android KitKat. No es por tener la más reciente interfaz, o mejoras visuales o porque dicen que en realidad no pasa nada en cuanto a virus. En realidad existe una vulnerabilidad que ataca a los sistemas operativos anteriores a Android 4.4. Ésta se llama CVE-2014-6041.
La vulnerabilidad se encuentra en el navegador web ASOP. Desde ahí, gente mal intencionada puede acceder de forma íntegra a todos los contenidos del correo, contactos, números de cuentas, fotos, videos, todo el contenido que se tiene.
Al poderse saltar la protección del navegador, se puede ejecutar cualquier tipo de código, sin ningún problema, ya que se salta todas las medidas de seguridad, dejando vulnerable al usuario, robando los datos y hasta pudiendo ser parte de una red botnet.
La única “solución”, a falta de una actualización del sistema operativo, sería la descarga de un nuevo navegador web desde la Google Play Store, por ejemplo Google Chrome o Dolphin Browser, de manera que al dejar de utilizar el que viene incluido por defecto, ya no se está expuesto al peligro que representa esta vulnerabilidad.
Fuente: Androisis