Después de que el FBI cancelara la reunión con Apple por recibir la ayuda de Cellebrite para acceder al iPhone 5c usado en el caso de San Bernardino, la empresa ahora pide que se posponga el caso en donde se usó un iPhone 5s para almacenar datos de traficantes de drogas.
Debido a que el gobierno podría emplear esa misma herramienta para obtener los datos del smartphone usado en el caso de Nueva York, quieren que se añada más tiempo, ya que de ser exitosa la obtención de los mismos, ya no sería necesario la solicitud de ayudarles.
No se sabe el tiempo exacto en que se requiere para ese caso, solo se dijo que serían “un par de semanas” pero en el de San Bernardino el cinco de abril se conocerá si se pudo acceder al contenido del smartphone. La solicitud deberá ser respondida por las autoridades a más tardar el 29 de marzo.
Con información de Recode