La semana pasada un niño de cuatro años y una niña de un año murieron calcinados en un incendio en Nicaragua, ocasionado por el recalentamiento de una tablet mientras su batería estaba siendo cargada, informó este jueves el Gobierno local.
El incendio ocurrió este miércoles en un barrio popular del oeste de Managua, cuando los niños estaban en compañía de su papá, mientras su mamá estaba trabajando, según la versión oficial. En este caso, el incendio ocurrió en uno de los cuartos de la casa donde estaban los pequeños.
Hasta el momento las autoridades no habían confirmado la causa exacta del incendio y tampoco se mencionó el modelo de la tablet en cuestión pero se sabe que era una tablet Samsung y estaba cargándose al momento del incendio.
En una fotografía podemos ver la tablet marca Samsung completamente quemada de la parte trasera donde justamente va colocada la batería y el cable de alimentación conectado que se derritió completamente en el punto donde se estaba cargando.
Se desconocen todos los detalles del percance, pero posiblemente la parte frontal de la tablet podría estar completamente quemada y las chispas/cenizas podrían haber expandido el fuego a otras áreas de la cama donde se aprecia que estaban los menores.
Si bien el papa de los menores Marvin Obando, afirmó que acudió de inmediato al cuarto donde estaban sus hijos, no llegó a tiempo, y vio que el niño estaba cubriendo con su cuerpo a su hermanita, a pesar de su corta edad.
“Gracias a él mi niña sobrevivió hasta las 3:40 de la mañana, me gustaría un aplauso para este pequeño”, dijo el joven papá, antes de romper en llanto.
El médico que atendió a los menores, Julián Corea, afirmó que el menor llegó con quemaduras en el 100% de su cuerpo, mientras que la niña tenía quemado un 98%. Las autoridades del Ministerio de Salud (Minsa) informaron que el niño murió anoche, mientras que la menor, con alguna esperanza de sobrevivir, falleció la madrugada de hoy, a pesar de los esfuerzos de un equipo de especialistas por salvar su vida.
Según la Dirección General de Bomberos (DGB), un equipo llegó rápidamente al lugar del incendio, pero aparentemente los niños ya habían sido retirados por su papá, aunque con pocas posibilidades de vida.