No es rara la guerra entre las empresas, telefónicas o no, pero si de
tecnología, compitiendo por las patentes de varios productos que
usamos, sobre todo los móviles, y no siempre terminan en buenos
términos.
Al parecer RIM y Motorola son la excepción ya que la
guerra que comenzó en 2007 ha terminado, después de mutuas demandas.
Lo
mejor es que el acuerdo no sólo es la parte económica que le pagarán a
Motorola, sino que ambos compartirán licencias tecnológicas y patentes,
lo cual beneficia a las dos.
Ojalá esta forma de trabajar sea
modelo para otras empresas.
Vía Muymovil