Un poquito de ciencia. Investigadores de la UIUC y la Universidad de Purdue acaban de publicar en la revista Nature sus experimentos con nanotubos de carbono para la creación de circuitos integrados flexibles. Aunque no lo parezca, tal vez es una noticia tan trascendente como lo fueron en su momento el descubrimiento del diodo y el transistor basados en silicio.
Los circuitos flexibles no son una idea nueva. Ya hemos visto prototipos muy interesantes de teléfonos y pantallas plegables, pero tienen la desventaja de están basados en compuestos orgánicos complejos que se descomponen y pierden sus propiedades en poco tiempo. En pocas palabras, prácticamente son productos desechables.
Lo que se acaba de publicar es que los circuitos basados en nanotubos de carbono de una sola pared (como el de la ilustración) son casi tan estables como los de silicio y además son muy fáciles de crear mediante técnicas serigráficas. Esto abre un montón de posibilidades para aplicaciones que de otra manera serían muy frágiles y costosas, como teléfonos y PDAs enrollables. Interesante, ¿no?
Via | El Universo de Tayo