Samsung ha ido perdiendo mercado en el sector de los teléfonos inteligentes de gama media y baja, esto es por la incursión y el gran éxito de marcas chinas como Xiaomi, que ofrecen equipos con grandes características a precios precios, lo que cautiva a muchos usuarios con presupuestos limitados.
La compañía asiática confirmó que estaba perdiendo su presencia entre los usuarios de rango medio, por lo que decidió cambiar la fabricación de sus dispositivos. Una de sus respuestas directas es la gama Galaxy A, equipos con diseño elegante y precios competitivos.
Sin embargo, Samsung quiere baja aún más el costo de sus equipos, sobre todo los de gama media y baja. Busca minimizar los costos de fabricación para tratar de ofrecer teléfonos con precios más bajos tal y como lo hacen las empresas chinas.
Para poder bajar los precios la empresa asiática seguirá la estrategia de muchos fabricantes chinos, pues van a subcontratar a otras empresas para el proceso de fabricación. De esta manera se reducen los costos y el precio final de los equipos.
Samsung asegura que este movimiento es una estrategia forzada para poder competir en un mercado cada vez más ajustado debido a la aparición de móviles chinos, mismos que están teniendo una gran aceptación en el mercado.
Con información de Gizchina
