Elon Musk, CEO de Tesla, anunció recientemente un retraso en la producción de robots humanoides para su uso interno. Si bien en abril se esperaba tenerlos operativos en las fábricas para finales de 2024, ahora la compañía apunta a una “producción baja” recién para el próximo año.
Grandes expectativas para Optimus
Optimus, el nombre del robot de Tesla, ha generado gran expectativa. Musk había insinuado su posible venta a otras empresas para 2026, a mayor escala.
El desarrollo de robots humanoides no es nuevo. Gigantes como Honda y Boston Dynamics (de Hyundai Motor) llevan años en esta carrera. La apuesta es clara: suplir la potencial escasez de mano de obra y automatizar tareas repetitivas, peligrosas o tediosas en logística, almacenaje y manufactura.
Sin embargo, Musk tiene antecedentes de incumplir promesas ambiciosas. En 2019, anunció una red de “robotaxis” autónomos para 2020, pero recientemente retrasó su presentación solicitando “un cambio de diseño importante” en la parte delantera del vehículo.
Próximos planes de Musk
Tesla presentó la primera generación de Optimus, apodado Bumblebee, en septiembre de 2022. Este año, la compañía mostró un video de la segunda generación doblando una camiseta en sus instalaciones.
En los últimos meses, Musk ha centrado su atención en la inteligencia artificial, la conducción autónoma, los robotaxis y Optimus, en un contexto de menor demanda de vehículos eléctricos (que representan más del 80% de los ingresos trimestrales de Tesla).
Los resultados del segundo trimestre de Tesla se esperan para este martes. Wall Street anticipa márgenes bajos, pero también se centrará en los ambiciosos planes de Musk para robotaxis y productos de IA. Las acciones de Tesla subieron alrededor del 1% antes de que el mercado abriera operaciones el lunes.
Fuente: Electrek