El presidente de los Estados Unidos de América, Barack Obama no había hablado directamente del problema que hay entre Apple y el FBI hasta ahora, en donde solicitó a las empresas de tecnología “resolver el problema del cifrado antes de llegar al congreso”. Desea que se encuentre una mejor manera en que puedan encontrar una forma adecuada para ayudar al gobierno a acceder a la información cifrada a los investigadores.
Esta solicitud la hace porque sabe que al llegar el caso cada parte defenderá su postura como la de las empresas de tecnología que alegan que tienen un fuerte cifrado o que el gobierno trata de convertirse en un ”gran hermano” o “Mundo Orwelliano”. En cuanto a la postura de los políticos, dice que van a buscar apresurarse lo cual es malo porque pueden tomar decisiones peligrosas sin analizar las consecuencias.
Buscando la imparcialidad en el caso, pide a las empresas que el cifrado pueda hacerse de una forma flexible, sin dar puntos de vista absolutos, porque “crear una caja negra” no va a cambiar la forma en que se ha vivido por 300 años y es darle un valor más allá de lo que tienen a los smartphones. A su parecer, lo ideal es crear un sistema de cifrado que sea lo más fuerte posible, lo más seguro pero también lo más accesible para los casos en donde se requiera acceder a los contenidos.
El reto que plantea Obama, es sin duda, ofrecer el equilibrio entre las dos partes en este caso, lo cual ha hecho que aumente la tensión en las empresas de tecnología, sobre todo en Apple. Esta situación solo ha provocado “dimes y diretes” en donde ambas partes aprovechan cualquier oportunidad para tirarse indirectas.
Con información de The Verge
