Menos es más, hay una brecha en el mercado Android para un equipo tamaño iPhone

size-pic

 

Hay una ideología que corre mucho entre los que conocemos a detalle las cuestiones de mercado, diseño y desarrollo dentro del mercado móvil, y es que si preguntas ¿Cuál es el mejor sistema operativo?, de manera certera respondería Android, pero si al mismo tiempo preguntas ¿Cuál es el mejor Smartphone? De igual manera respondería que es el iPhone, algunos dirán con cara de duda que mis respuestas están mal fundadas, pero la verdad es que hay que entender cada aspecto de ambos temas para poder aclarar estas dudas.

Dentro del panorama móvil tenemos una gran variedad de equipos disponibles, con la gran mayoría siendo Android, seguido por Apple y el iPhone y siendo alcanzados con un esfuerzo enorme por Windows Phone, Blackberry (dentro de su nuevo esquema con BB10) no podría figurar por el momento debido a que solo cuenta con el Z10 y Q10, además de que no están disponibles en todo el mundo.

Si bien el iPhone ha logrado convertirse en un equipo de elite con cada equipo lanzado bajo esta familia, Android ha logrado cubrir las necesidades de los usuarios que iOS no ha hecho en tanto tiempo de existencia. Al mismo tiempo Android no ha logrado cubrir las peticiones de hardware que iOS ha logrado con sus equipos, y es que en un concepto muy resumido Google tiene el software que el hardware de Apple necesita, Android es la plataforma que el iPhone necesita, y viceversa. Para hacerlo más exacto veámoslo desde los diferentes puntos de comparación.

Hardware

Si bien los equipos con Android se lucen por cada característica que contienen el problema se coloca entre el precio y lo necesario para poder hacer trabajar un equipo de manera eficiente. Un buen Smartphone es que puede hacer más con poco, el ejemplo es el iPhone o los equipos Lumia, smartphones que trabajan de manera eficiente sin tener que contener un procesador de cuatro núcleos o 2Gb de RAM.

Aparte de la cuestión de características internas también hay que tomar en cuenta lo externo, el nivel de diseño y calidad en los materiales del iPhone lo hacen muy llamativo, sobre todo para el iPhone 5, el cual ha cambiado el diseño de calidad plástica en la carcasa por una más resistente de aluminio con estética mate en varios colores, lo cual en verdad es muy detallado, ya que no se trata de una carcasa pintada de manera simple. Más que nada por estos detalles es el por qué se piensa en el iPhone como uno de los mejores hardwares del mercado.

Software

Aquí es donde muchos dicen “Android gana por ser de código abierto y gratuito”, es cierto y no objeto ante la idea de que uno de los méritos de Android es ser un proyecto libre, de código abierto y completamente gratuito, pero no se trata de solo ser así, el éxito de un Smartphone también está en manos del fabricante y como maneje la interfaz de Android para sus equipo, y es que mientras más le agreguemos más pesado se volverá su uso, sino recordemos el antiguo MotoBlur dentro del Atrix, Droid 2, o RAZR XT910, equipos con buenas prestaciones pero un desarrollo de Android muy pobre.

Si bien esto podría ser un detalle para no confiar en Android en cierto grado es parte de lo que convierte a esta plataforma en un entorno muy cómodo, y es que si sobresale un error no tenemos que esperar a que el fabricante realice alguna actualización, si tenemos el conocimiento, podríamos ser nosotros quienes demos solución al problemas o más comúnmente buscar la respuesta por medio de los diferentes foros de Android, algo que con el iOS, dada su estructura legal, solo cae sobre ‘Restaurar’ o llevar a garantía, aunque hay uno que otro proceso diferente.

Con Android logramos ver un avance muy detallado en el entorno, el soporte a diferentes resoluciones, la fluidez, soporte externo de desarrolladores, etc. En cuanto a iOS no rescontramos con una interfaz ya muy vista que hasta a los más antiguos usuarios ya “aburre”, lo que se convierte en un defecto no previsto por el mismo Apple.

Tamaño

Aquí es donde vemos el mayor rasgo de diferencia, cierto es que Andriod permite el soporte a diferentes tipos de pantallas, y si recordamos HTC fue el primero en hacer uso de una pantalla grande dentro de un equipo con el HTC HD2 de 4.2” potenciado por Windows Mobile, esto dio pie a que los demás fabricantes vieran hacia un mercado nuevo de equipos con grandes pantallas, mejores resoluciones y, obviamente, mayores ventas.

Antes se pensaba que un equipo de tamaño tan absurdo como el Dell Streak se convirtiera en unos equipos llamativos y utilizables, irónicamente así es ahora, con grandes ejemplos como el Note II, el Galaxy SIII, el Optimus Vu, Butterfly, el Grand S y el un poco excedido, Huawei Ascend Mate de 6.1”, el cual se hace llamar Smartphone en algunas regiones. El inicio fue con pantalla de 4” a 4.2” con resoluciones pobres pero un tamaño manejable y no tan incómodo, pero ahora muchos usuarios prefieren un equipo de casi 7” por razones poco justificables.

En el extremo de la escala tenemos al iPhone, un equipo que ha mantenido un tamaño no rebasando las 4”, en el caso del iPhone 5, y sigue siendo un buen equipo con tamaño ergonómico, cómodo y fácil de usar, por lo cual se justifica la afirmación de que el tamaño no importa dentro del mercado de smartphones, sino entonces ¿por qué Blackberry apostó de manera directa hacia un equipos de 4,2” de tamaño con el Z10?, simple, buen sistema + buenas características + tamaño cómodo = un Smartphone eficiente.

Un pequeño paso hacia atrás para ver mejor adelante

Quizá se escuche muy pasado de moda, pero quizá los fabricantes de smartphones deberían probar lanzar equipo con tamaño menor, algo como al tamaño iPhone, y es que, no es necesario copiar al iPhone en diseño o software para poder tener éxito, más bien sería cuestión de tener un equipo en el mismo rango de tamaño para poder descartar el factor de display y así comparar, de manera más exacta, los Smartphones Android, y más aún se trataría de un detalle que ayudaría a reducir costos y mejorar el comercio de equipos con este sistema aún más de lo que se ha logrado con lo actual.

A mi parecer son muy pocos los equipos de pantalla grande que en verdad suponen un hip en el mercado, además de que es mucho más cómodo utilizar y trasportar un equipo de tamaño entre 4” y 4.2”, como un Motorola RAZR i, con pantalla Super AMOLED pero un tamaño sin bordes de 4.2” que lo hacen muy fácil de manejar a una mano y sobretodo con grandes características sin elevar bastante el precio.

VIA | The Verge

 

Salir de la versión móvil