El 10 de septiembre comenzó en Wuxi, China, la Exposición Mundial de la Internet de las Cosas (WIOT) de 2017 de cuatro días de duración. Visitantes procedentes de más de 20 países y regiones de todo el globo terráqueo y representantes de más de 500 empresas y organizaciones se reunieron a orillas del lago Tai para analizar el desarrollo del sector y aprovechar las oportunidades que se presentan con la marea creciente de la Internet de las Cosas.
Como indican los datos más recientes proporcionados por la filial en Wuxi de China Mobile Communications Corporation Jiangsu Company Limited, a finales del pasado mes de agosto la cantidad de tarjetas de Internet de las Cosas (IoT) emitidas por China Mobile en Wuxi había superado la cantidad de sus usuarios de comunicaciones a través de teléfonos celulares; en comparación con las cifras para el mismo período del año pasado, esto representa un aumento de más de cinco millones de tarjetas.
Wuxi es tan solo un microcosmos del rápido desarrollo de la IoT en China. China lanzó la propuesta “Sensing China” por primera vez en 2009. Fue en ese año que el Consejo de Estado de China aprobó el establecimiento de un área demostrativa de la innovación a nivel nacional en redes de sensores en Wuxi, marcando el inicio de la IoT de China. Hasta el momento, Wuxi se ha convertido en un punto neurálgico para el desarrollo del sector de la IoT de China, y los ingresos empresariales de empresas dedicadas a actividades fundamentales de la IoT crecieron hasta más de 200 mil millones de RMB en 2016, y se crearon más de 150.000 empleos.
Según el más reciente Informe Anual sobre el Desarrollo de la IoT en China 2016-2017 publicado por China Economic Information Service y Xinhua Wuxi IoT Consulting Center, aunque China en la actualidad se clasifica en el puesto número 23 en el Índice de Conectividad Global, y es todavía un adoptador, se espera que para el año 2020 existan en China mil millones de conexiones M2M (máquina-a-máquina) y que la escala del sector de la IoT supere los 1,5 billones de RMB.
La IoT de banda estrecha (NB-IoT, por sus siglas en inglés) es una red de baja velocidad, caracterizada por bajo consumo de energía, extensa cobertura y sólida penetrabilidad. En el momento actual, las tres principales empresas operadoras de telecomunicaciones de China están acelerando la construcción de sus NB-IoT de baja velocidad, y pronto arribarán redes 5G de alta velocidad. Los estándares unificados para redes de comunicaciones y la cobertura multicapa han superado la dificultad previa representada por aplicaciones fragmentadas para IoT. Además, los precios de algunos sensores y chips han descendido y las demandas de los consumidores por dispositivos vestibles, seguridad en el hogar y hogar inteligente emergen, pavimentando el camino para que las tecnologías y aplicaciones de la IoT entren en un período activo de innovación. Como señaló Wu Hequan, un académico de la Academia China de Ingeniería, el patrón del desarrollo de la IoT en China está ahora dejando de ser dominado por el gobierno para ser impulsado por el mercado.
La innovación en las aplicaciones para la IoT en China puede “sentirse” en todos los sectores: en el fomento del uso de la “tarjeta de identificación” electrónica para vehículos, para sacar de circulación los vehículos con matrículas falsas; en la emisión de esfigmomanómetros inteligentes y medidores de azúcar en la sangre para que los médicos de cabecera puedan saber en tiempo real la condición de pacientes que sufren enfermedades crónicas; en la instalación de sensores en los ventiladores para “sentir” las condiciones de operación de ventiladores alejados; en escenarios cotidianos como atención médica y transporte; y en escenarios productivos como protección medioambiental y manufactura.
Los especialistas consideran que, debido a que China tiene inmensas demandas de mercado impulsadas por políticas industriales nacionales y a que está aprendiendo al tiempo que aplica tecnologías como ferrocarriles de alta velocidad y promueve el desarrollo mediante aplicaciones que revolucionan las tecnologías esenciales fundamentales, es totalmente posible que China tome la delantera en algunos campos relacionados con la IoT.
Con información de: World Internet of Things Exposition
