Un equipo de investigadores y físicos de la Universidad de Arkansas ha logrado crear un circuito capaz de capturar el movimiento térmico del grafeno y convertirlo en corriente eléctrica. Esta tecnología podría implantarse en un chip para proporcionar energía limpia, ilimitada y de bajo voltaje para dispositivos móviles.
Esto es una prueba de una teoría que los físicos desarrollaron en la U de A hace tres años de que el grafeno independiente, una sola capa de átomos de carbono, se ondula y se dobla de manera prometedora para la recolección de energía.
Según se dice en el estudio, a temperatura ambiente, el movimiento térmico del grafeno induce de hecho una corriente alterna en un circuito. Los científicos afirman que el próximo objetivo es determinar si la corriente continua se puede almacenar en un condensador para su uso posterior, para ello se debe minimizar el circuito y moldearlo del tamaño de una oblea.
Si se logran construir millones de estos pequeños circuitos pudieran fabricarse en un chip de 1 milímetro por 1 milímetro, podrían servir como reemplazo de batería de bajo consumo y la autonomía podría durar por más tiempo en comparación con las baterías tradicionales.
Con información de EuropaPress
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