La industria espacial está viviendo una transformación profunda. Boeing y Lockheed Martin, dos gigantes aeroespaciales, han decidido vender United Launch Alliance (ULA), su empresa conjunta fundada en 2006.
SpaceX continúa su dominio del espacio
Esta decisión, que podría cerrar un acuerdo de hasta 3.000 millones de dólares con Sierra Space, se produce en un contexto marcado por el creciente dominio de SpaceX en el mercado de lanzamientos espaciales.
Los problemas de Starliner, la cápsula espacial de Boeing, y los constantes retrasos en el desarrollo del cohete Vulcan de ULA han debilitado la posición de ambas compañías.
A pesar de los intentos de vender ULA en 2019, no fue hasta ahora que se concretó un acuerdo. Sierra Space, con su ambicioso proyecto del avión espacial Dream Chaser, se perfila como el comprador ideal para impulsar su desarrollo y competir con otras empresas privadas del sector.
¿Qué sucede con el proyecto Starliner?
La crisis de Starliner, la cápsula espacial de Boeing, continúa sumiendo a la compañía en problemas.
A pesar de que la venta de United Launch Alliance (ULA), la empresa conjunta de Boeing y Lockheed Martin, no está directamente relacionada con los fallos de Starliner, ambas situaciones reflejan los desafíos que enfrentan estas compañías en un mercado espacial cada vez más competitivo, dominado por SpaceX.
Aunque ULA se ha centrado en misiones gubernamentales, Starliner, que combina el cohete Atlas V de Lockheed Martin con la cápsula de Boeing, era clave para su estrategia comercial. Sin embargo, los recientes problemas de Starliner ponen en duda el futuro de esta cápsula.
La NASA ha decidido traer de vuelta a Starliner sin tripulación debido a una fuga de helio y fallos en varios motores de maniobra.
Esta decisión retrasa aún más el desarrollo de Starliner y obliga a los astronautas Sunita Williams y Barry Wilmore a esperar hasta febrero de 2025 para regresar a la Tierra a bordo de una Crew Dragon de SpaceX.
A pesar de los contratiempos, la NASA mantiene su confianza en Starliner como una futura alternativa a Crew Dragon. Sin embargo, Boeing deberá resolver de manera definitiva los problemas técnicos de su cápsula para recuperar la confianza del público y de las agencias espaciales.
Fuente: Slashdot