El gobierno chino está demostrando astucia en medio de las tensiones con su contraparte estadounidense en el campo del desarrollo de semiconductores de vanguardia.
Esfuerzos incansables por parte de China
La administración liderada por Xi Jinping está abordando este desafío desde dos frentes estratégicos.
Dadas las crecientes restricciones impuestas por Estados Unidos, especialmente en el ámbito de los semiconductores, los fabricantes chinos de circuitos integrados han intensificado sus esfuerzos en los últimos meses para adquirir equipos de litografía esenciales.
Este enfoque proactivo busca contrarrestar las sanciones y garantizar la continuidad de la cadena de suministro de tecnología crucial para China.
El futuro del mercado de los semiconductores
China está impulsando su industria de semiconductores mediante el desarrollo de su propia tecnología de fabricación de circuitos integrados y la implementación de equipos de producción de chips de última generación.
Este proceso implica un esfuerzo monumental en investigación, una inversión significativa de tiempo y la disposición de considerables recursos financieros.
Uno de los recursos más críticos en este proceso es, sin duda, el tiempo. El avance en el desarrollo de sus propios equipos litográficos de última generación es esencial para evitar un mayor distanciamiento respecto a Estados Unidos y sus aliados en el ámbito de los semiconductores.
Restricciones para China y sus aliados
La celeridad en la adquisición de esta capacidad tecnológica se presenta como una prioridad estratégica para China, ya que reforzaría su posición en la competencia global de tecnología y aseguraría su autonomía en el suministro de componentes clave.
Las restricciones impuestas el pasado 16 de noviembre han generado un impulso significativo en las adquisiciones realizadas por los fabricantes chinos.
Este último conjunto de sanciones estadounidenses, dirigido a China y sus naciones afiliadas, incluyendo Rusia e Irán, ha entrado en vigor con el objetivo de obstaculizar el progreso tecnológico del gigante asiático al poner fuera de su alcance los equipos de litografía más avanzados fabricados por aliados de Estados Unidos.
ASML, el intermediario más afectado
Entre los afectados, la empresa neerlandesa ASML, reconocida por producir las máquinas de litografía más sofisticadas, ha experimentado los mayores impactos derivados de estas nuevas sanciones.
En los últimos años, ASML se ha visto impedida de proporcionar a sus clientes chinos sus equipos más avanzados: las máquinas de litografía de ultravioleta extrema (UVE).
Sin embargo, la situación se ha intensificado, ya que ahora tampoco puede suministrarles los equipos de litografía de ultravioleta profundo (UVP), que son ligeramente menos avanzados.
Incremento en pedidos y producción hacia China
Según Peter Wennink, el CEO de ASML, durante el tercer trimestre de 2023, un 46% de los ingresos de la compañía provino de China.
Wennink ha anticipado que la empresa enfrentará una disminución de aproximadamente el 15% en sus ventas en China debido a las sanciones estadounidenses que entraron en vigor el 16 de noviembre.
A principios del pasado mes de noviembre, la empresa anunció que estaba realizando todos los esfuerzos posibles para satisfacer las necesidades de sus clientes. Esta declaración claramente sugiere que estos esfuerzos están dirigidos a cumplir con las demandas de sus clientes en China.
Lo más sorprendente es que, según informa el South China Morning Post, un medio confiable, el valor de las importaciones de máquinas de litografía desde Países Bajos realizadas por empresas chinas en noviembre experimentó un asombroso incremento del 1,050%.
