Hace un año, la revista Forbes resaltaba a Alexandr Wang como uno de los miembros más jóvenes del exclusivo club de los nuevos multimillonarios a nivel mundial. En aquel entonces, con solo 25 años, ya había acumulado una fortuna de $1,000 millones de dólares, todo ello gracias a su destacada contribución al entonces emergente campo de la inteligencia artificial.
Un pródigo del desarrollo de software
El ascenso al estatus de multimillonario fue resultado del prodigioso talento de Wang en el ámbito tecnológico y de la programación. Sus habilidades le condujeron a incursionar en el desarrollo de aplicaciones y software innovadores.
Siendo hijo de un físico nuclear chino que desempeñó su labor en la base militar donde se gestó la creación de la primera bomba nuclear por Oppenheimer, Wang ha sabido forjar una trayectoria que lo ha catapultado a las cimas del éxito.
Alexandr Wang proviene de una familia de científicos nucleares chinos que migraron a Nuevo México para formar parte del equipo en la base militar mencionada previamente.
A sus 17 años, ya se encontraba inmerso en el mundo de la programación al unirse como desarrollador al portal Quora, un paso que lo llevaría a cruzarse con Lucy Guo, la empresaria con la que más adelante fundaría la startup que revolucionaría sus destinos.
Aunque Wang inició su educación en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), su pasión por los negocios rápidamente superó su interés por las aulas.
En una entrevista concedida a Forbes, compartió: “Le comuniqué a mis padres que esto sería solo una actividad de verano. Obviamente, nunca regresé a la escuela“. Su camino estaba marcado por la visión emprendedora que lo impulsaría hacia nuevas direcciones.
Inteligencia Artificial que ha captado la atención
Fue entonces cuando dio vida a Scale AI, una entidad que él mismo describe como “los implementos indispensables en la fiebre del oro de la inteligencia artificial generativa”.
La perspicaz decisión de Wang consistió en colaborar con gigantes corporativos con vastos volúmenes de datos, entre ellos AirBnB y Toyota. Estas multinacionales requerían una solución eficiente para etiquetar sus datos, y en ese punto emergió Scale AI como el actor clave.
En la actualidad, Wang ostenta la propiedad de una de las firmas más influyentes en el epicentro tecnológico de Silicon Valley, con una valuación que supera los $7,300 millones de dólares.
Además, Scale AI ha logrado atraer inversiones tanto del Departamento de Defensa de los Estados Unidos como de OpenAI, lo que ha llevado a que el ejército estadounidense utilice la creación de Wang para potenciar su sistema de reconocimiento de imágenes vía satélite, a la vez que monitoriza los efectos de los misiles rusos en Ucrania.
Su invención no solo suscita el interés gubernamental, sino que también ha captado la atención de empresas destacadas como Lyft, General Motors y Flexport. En la actualidad, más de 300 compañías hacen uso de Scale para agilizar el manejo de la abrumadora cantidad de datos de manera eficaz.
Con tan solo 26 años, Wang se erige como un posible candidato a convertirse en el multimillonario más joven en la historia global. De seguir así, podría colocarse al nivel de magnates de la talla de Elon Musk, a quien admira, Mark Zuckerberg e incluso Jeff Bezos.