A lo largo de este año, prominentes visionarios en el ámbito tecnológico han compartido sus pronósticos acerca de las profesiones que podrían enfrentar la obsolescencia, incluyendo las perspicaces reflexiones de Bill Gates sobre los trabajos que podrían experimentar transformaciones.
No todos los empleos estarán en peligro
Sin embargo, en menor medida se ha prestado atención a las ocupaciones que se perfilan como fundamentales en el emergente panorama laboral.
Recientemente, Sam Altman, la brillante mente detrás de OpenAI y, por ende, de ChatGPT, ha optado por no solo arrojar luz sobre las profesiones que se mantendrán, sino también sobre aquellas que podrían resultar indispensables en el mundo en constante evolución que tenemos ante nosotros.
Son numerosas las opciones que podrían considerarse como sólidas contendientes para resistir la embestida de la inteligencia artificial; no obstante, Altman ha manifestado una certeza inequívoca en relación con cuál profesión debería perdurar de manera inalterable en nuestro entramado laboral.
Sam Altman emerge como una figura preeminente en el ámbito del desarrollo de inteligencia artificial, desempeñando un papel central en su evolución. En el pasado, también se refirió a los empleos susceptibles de desvanecer, sin embargo, en esta ocasión, se inclina por presentar una visión más esperanzadora con relación al porvenir de la tecnología de IA.
Los maestros serían los menos afectados por la IA
Conforme a lo informado por Omicrono, Altman profesa un optimismo considerable en cuanto a la cuestión laboral. Sostiene que prácticamente todos los trabajos que puedan desvanecerse serán reemplazados por otros roles más adecuados para la era de la inteligencia artificial.
Incluso en el ámbito de los empleos no altamente calificados, la intervención humana continuará siendo necesaria.
Altman ha evitado enumerar las profesiones que enfrentarán transformaciones, pero sostiene que aquellas que experimentarán el menor impacto de la IA en sus dinámicas laborales serán los educadores, ya que el proceso de instrucción seguirá desempeñando un papel fundamental.
Cualquier profesión que implique una interacción
En líneas generales, las ocupaciones que implican interacción directa con el público se mantendrán, ya que los individuos preferirán el contacto humano. Además, si bien ChatGPT puede enriquecer el proceso educativo, el método más holístico para brindar una educación completa a las nuevas generaciones continuará involucrando a seres humanos.
De manera paradójica, existe un contraste notable con la perspectiva de Bill Gates, quien afirmó con convicción que los infantes adquirirán habilidades de lectura y escritura en tan solo 18 meses gracias a la inteligencia artificial, planteando así interrogantes sobre la labor que los educadores realizan al moldear a las próximas generaciones.
Incluso ciertas ocupaciones de carácter manual, como la labor de los mecánicos, parecen resistirse a ser desplazadas por la generación de la inteligencia artificial, ya que la presencia humana es indispensable en tareas de manufactura.
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Tareas de oficina y repetitivas sí serán desplazadas
Ha resultado irónico para algunos observadores que ciertos empleos de naturaleza menos especializada sean difíciles de reemplazar, mientras que aquellos que se perfilan para ser con rapidez obsoletos son precisamente los que demandan una alta especialización.
Esto es particularmente cierto para roles que demandan un profundo nivel de estudio, pero que al mismo tiempo implican la realización de tareas repetitivas de oficina. Junto con traductores e intérpretes, estos puestos parecen estar en la primera línea para ser completamente automatizados por los robots del futuro.
De todas formas, hasta el momento, las inteligencias artificiales no están alterando nuestro porvenir de manera significativa. Es innegable que estas primeras iteraciones resultan considerablemente menos avanzadas en comparación con lo que aguarda en el horizonte, especialmente considerando las inmensas inversiones que se están materializando.
