Imágenes falsas de líderes mundiales arrestados, helados de McDonald´s con trozos de tocino y fotos con dedos de más gracias a la IA.
Suena extraño, ¿verdad? Pues todo esto es parte de la llamada “slop” de la inteligencia artificial (IA), un término nuevo que engloba el contenido basura, inútil o engañoso generado por esta tecnología.
Nuevo concepto para contenido “basura”
Este concepto se está viralizando en blogs de tecnología, medios de comunicación y foros online, donde abundan ejemplos de IA descontrolada.
¿Por qué “slop”? Si el término te suena familiar, es porque comparte parentesco con el “spam”, esos correos electrónicos no deseados que inundan nuestras bandejas de entrada desde 1993.
La creciente capacidad de la IA para crear texto, imágenes, vídeos y otro tipo de contenido sin apenas intervención humana plantea un escenario preocupante: la proliferación del “sloap” en páginas web falsas, redes sociales, foros y cualquier rincón de internet.
No caigas en estos engaños, aprende a identificarlos
Uno de los mayores peligros de la IA deficiente es la dificultad para discernirla del contenido real. Cuando la IA “alucina” o proporciona información errónea o fuera de contexto, no siempre es evidente.
A veces, la IA puede ser engañada por datos satíricos o deliberadamente falsos extraídos de la red, o simplemente puede estar sesgada por el tipo de información con la que se ha entrenado.
Verificar si una imagen o vídeo ha sido manipulado por IA puede ser complejo, y en el caso del texto, no siempre queda claro el origen de la información.
Por ejemplo, siempre es recomendable comprobar que la información proporcionada por herramientas como ChatGPT esté actualizada y provenga de fuentes o conjuntos de datos fiables.
¿Cómo percatarnos de este tipo de contenido?
Aquí te dejamos algunos consejos para evitar caer en este tipo de engaños.
Busca elementos extraños en el texto generado por IA, como frases inusuales o irrelevantes. En imágenes o vídeos, fíjate en movimientos faciales extraños o fondos con fusiones poco naturales.
¿De dónde viene? Revisa la fuente. ¿La información proviene de un medio reconocido o de un sitio desconocido? Verifica la información, si sospechas de algo, busca la información en Google y corrobórala con fuentes acreditadas.
Puede que no nos guste, puede que pronto nos sintamos abrumados por ella, pero al menos ahora tenemos un nombre para toda esta farsa que recorre internet, la basura fabricada por la inteligencia artificial.
Fuente: Simon Willisons Weblog