¿Podría una máquina predecir cuándo morirás? La inteligencia artificial está acercándose a esta posibilidad gracias a tecnologías como Life2Vec, desarrollada por el investigador Sune Lehmann.
¿Cómo funciona Life2Vec?
Este algoritmo, entrenado con datos de millones de personas, puede predecir con sorprendente precisión no solo la fecha de fallecimiento, sino también otros logros vitales como el éxito profesional o la formación de una familia.
Pero ¿qué implican estos avances? ¿Estamos preparados para un futuro donde la IA puede predecir nuestra vida?
Life2Vec, bautizado así por su capacidad de representar la vida de una persona como un vector matemático, funciona analizando patrones en vastos conjuntos de datos.
Al identificar correlaciones entre variables como edad, educación, estado civil y otros factores, el algoritmo puede predecir con alta probabilidad futuros eventos. Sin embargo, esta capacidad plantea interrogantes éticos sobre privacidad, discriminación y el potencial de manipulación.
Una base de datos con millones de parámetros
La base del modelo Life2Vec son los datos anónimos de alrededor de seis millones de daneses, recopilados por la agencia oficial Statistics Denmark. Analizando secuencias de eventos, Life2Vec puede predecir hitos vitales e incluso la muerte con una precisión sorprendente.
En el caso de la mortalidad, el algoritmo acierta en el 78% de los casos. También predice mudanzas a otras ciudades o países con un 73% de precisión.
“Nos centramos en la mortalidad temprana”, explica Sune Lehmann, el investigador detrás de Life2Vec. “Analizamos a personas entre 35 y 65 años, y en base a un periodo de ocho años (2008-2016), intentamos predecir si fallecerán en los siguientes cuatro años”.
“El modelo lo hace muy bien, mejor que cualquier otro algoritmo que hayamos encontrado”, afirma Lehmann. Según los investigadores, enfocarse en este rango de edad (donde las muertes son menos frecuentes) permite verificar la fiabilidad del algoritmo.
“Por ahora, es un proyecto de investigación en el que exploramos las posibilidades y limitaciones”, aclara Lehmann. Su equipo también planea analizar resultados a largo plazo y el impacto de las conexiones sociales en la salud y la vida.
La ética y el uso de la Inteligencia Artificial
Expertos en ética y tecnología advierten sobre los riesgos de una IA que puede predecir nuestro futuro. La transparencia, la equidad y la responsabilidad son fundamentales para evitar que estas herramientas se utilicen para discriminar o manipular a las personas.
La Unión Europea ha dado un primer paso con su ley de IA, pero aún queda mucho por hacer para garantizar un uso responsable de estas tecnologías.
¿Cómo podemos asegurar que la IA se utilice para el bien de la humanidad? La respuesta pasa por una regulación sólida que obligue a las empresas a ser transparentes sobre sus algoritmos y a garantizar la privacidad de los datos.
Además, es necesario establecer mecanismos de auditoría independientes para verificar que estas tecnologías no perpetúen desigualdades.
Fuente: Science Alert