Cada vez más empresas están adoptando progresivamente el uso intensivo de la inteligencia artificial, depositando una confianza ciega en sus respuestas y considerando que ciertos trabajadores humanos que realizan esas mismas tareas pueden ser fácilmente reemplazados.
La IA comienza a desplazar a los humanos
Este fue precisamente el caso de Dean Meadowcroft, un empleado que solía desempeñarse como redactor publicitario en un pequeño departamento de marketing. Su labor consistía en crear comunicados de prensa, publicaciones en redes sociales y otros contenidos similares para la empresa.
No obstante, su situación cambió a finales del año pasado cuando la compañía implementó un sistema de inteligencia artificial. Según explicó a la BBC, inicialmente se reconocía la necesidad de contar con un humano que colaborara con la IA, pero con los sorprendentes avances que se están logrando en un tiempo tan corto, parece que esa necesidad ha desaparecido gradualmente.
Pasados aproximadamente 4 meses desde la implementación de la IA, el equipo de Meadowcroft, conformado por 4 personas, fue despedido. Aunque no puede afirmarlo con certeza absoluta, está totalmente convencido de que esto se debe a que la inteligencia artificial los ha reemplazado en su labor.
Tareas administrativas las más propensas a este cambio
“Al principio, encontraba divertido pensar que la IA pudiera sustituir a los escritores o tener un impacto en mi trabajo, pero eso cambió cuando sucedió”, comenta.
Existe una tendencia que no afectará a todos por igual, pero que se considera “inevitable”. Esta situación ha generado grandes debates sobre qué trabajos podrían estar en riesgo. De acuerdo con un informe de Goldman Sachs a principios de este año, la IA podría potencialmente reemplazar el equivalente a 300 millones de empleos a tiempo completo.
No obstante, es importante tener en cuenta que la pérdida de empleos no se distribuiría de manera uniforme en toda la economía y los sectores. Según el informe, el 46% de las tareas en profesiones administrativas y el 44% en profesiones legales podrían ser automatizadas, mientras que solo el 6% en la construcción y el 4% en el mantenimiento corren ese riesgo.
Por otro lado, según el Foro Económico Mundial, se estima que la tecnología creará 97 millones de nuevos empleos para el año 2025, superando en 12 millones los empleos que destruirá.
Específicamente, los trabajos relacionados con el desarrollo y mantenimiento de la IA y la automatización experimentarán una adopción cada vez más amplia a medida que la IA se integre en múltiples industrias.
Si bien es comprensible la preocupación por el futuro del empleo, la realidad es que el desplazamiento humano será solo una consecuencia temporal. Por el contrario, la inteligencia artificial se convertirá en un motor importante de empleo en el futuro.