Un grupo de expertos en alimentos han logrado imprimir en 3D un filete de pescado comestible

En los últimos años, la fabricación aditiva ha emergido como la tendencia gastronómica más popular, revolucionando por completo el proceso de creación de alimentos de diversas categorías. Esta tecnología permite la personalización de los productos de acuerdo con las necesidades específicas de los consumidores.

Primer filete de pescado impreso en 3D

Un ejemplo destacado de esta tendencia es la colaboración entre Steakholder Foods, una empresa israelí especializada en tecnología alimentaria, y Umami Meats, una compañía singapurense dedicada al cultivo de pescado. Juntas, han logrado un hito notable: la creación del primer filete de pescado impreso en 3D.

Una nueva forma revolucionaria de disfrutar el pescado ha surgido recientemente. Esta innovación consiste en la utilización de células animales cultivadas en laboratorio, las cuales se transforman en tejido muscular y graso para luego ser impresos en 3D mediante una tinta biológica.

El resultado de este proceso es un filete de pescado que imita de manera sorprendente las características del pescado natural. Aunque actualmente el costo de producción sigue siendo elevado, se espera que esta tecnología transforme por completo la industria alimentaria al permitir una producción más sostenible y ética, sin necesidad de sacrificar animales.

Mayor control y seguridad con células de pescado

Además, garantiza la seguridad y la salud de los alimentos al permitir un control preciso de los ingredientes utilizados en la tinta biológica y en la elaboración del producto final.

Para la fabricación de estos filetes de pescado, una impresora 3D se encarga de desplazar un plato de vidrio y, con cada pasada, imprime un filete de color blanco con una textura, sabor y escamas similares a las del pescado original.

De hecho, aquellos afortunados que han tenido la oportunidad de probarlo afirman que es difícil distinguir la diferencia una vez que se ha frito y condimentado. Actualmente, se están trabajando en la simulación de un filete de mero y otro de anguila, y se espera agregar pronto otras tres especies en peligro de extinción a esta lista.

Por el momento es económicamente inviable 

Indudablemente, este método de fabricación es considerablemente más sencillo que el utilizado para la carne de res, pero presenta algunas desventajas. Si bien se ha investigado mucho sobre las células madre de vaca, se sabe menos acerca de las células de peces.

“Tenemos que descubrir qué tipo de alimentación prefieren las células, cómo les gusta crecer, y en realidad hay poca información disponible para comenzar”, explica Mihir Pershad, director ejecutivo de Umami. La cantidad de científicos dedicados a la biología de las células madre de peces es una fracción mínima en comparación con aquellos que se enfocan en células animales y humanas.

Aunque todavía hay mucho por investigar y hacer, nos encontramos ante un gran avance en la forma en que los consumidores podrán alimentarse en el futuro, lo cual podría resolver problemas actuales como la sobreexplotación de animales.

A medida que los productos impresos en 3D se vuelvan más complejos y los procesos de producción se optimicen, los precios de estos productos podrán disminuir y su creación y consumo se volverán más comunes. En el futuro, esta tecnología podría expandirse a una amplia variedad de alimentos, permitiendo que los consumidores disfruten de opciones más éticas, sostenibles y saludables.

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