La siguiente ola de procesadores destinados a dispositivos móviles apunta a implementar una avanzada tecnología de fabricación de 3 nanómetros.
TSMC dedicada a Apple
Este avance ha desencadenado una avalancha de pedidos en las plantas de producción, saturando prácticamente sus capacidades y dejando escasas oportunidades para los fabricantes de unidades de procesamiento móvil.
Se informa que TSMC, uno de los principales fabricantes de chips, ha destinado casi la totalidad de su capacidad de producción en el proceso de 3 nanómetros para atender a la demanda de Apple, mientras que también ha reservado una porción para Mediatek.
Esta situación deja tan solo un 15% de la capacidad para Qualcomm, una figura de gran relevancia en el sector de la fabricación de procesadores móviles.
Tecnología heredera de Samsung
De acuerdo con esta perspectiva, en el caso del Snapdragon 8 Gen 4, Qualcomm planearía distribuir su proceso de producción entre el 15% de capacidad que TSMC tiene disponible y la innovadora tecnología GAA de 3 nanómetros de Samsung.
Sin embargo, recientes indicios sugieren que Qualcomm ha reconsiderado su enfoque y podría optar por confiar por completo en la capacidad de manufactura de Samsung.
En el momento actual, tanto el proceso N3E de TSMC como la tecnología GAA de Samsung exhiben tasas de rendimiento comparables, con un índice de éxito cercano al 60%.
According https://t.co/kAKJOw8axx ,
Snapdragon 8 Gen 4 For Galaxy
Manufacturers from Samsung Foundry ? pic.twitter.com/CQ1HLCqJok— Connor / ?? / ??? (@OreXda) August 13, 2023
Posible retraso de la próxima generación
En otro ámbito, a pesar de los esfuerzos de TSMC por incrementar su capacidad de producción con su proceso de 3 nanómetros, todo indica que no logrará estar a tiempo para satisfacer las necesidades de manufactura del próximo Snapdragon 8 Gen 4.
Esto cobra mayor relevancia dado que Samsung ha adoptado una arquitectura más avanzada, conocida como GAA, en contraste con el enfoque tradicional FinFET de TSMC.
Si bien aún no se han revelado las divergencias entre ambos chips fabricados utilizando estas distintas tecnologías, es evidente que la confianza depositada por Samsung en Qualcomm podría inclinar la balanza hacia la posibilidad de que la totalidad de la producción se traslade a las instalaciones de Samsung.
