Hoy se anunció que Samsung obtuvo una ganancia en el 2017 de alrededor de $50 mil millones de dólares, adicional a otro record por la obtención de $14.5 mil millones los cuales fueron generados durante el último trimestre del año pasado por parte de la compañía surcoreana.
Y contrario a lo que pudiésemos pensar, estos números no están centrados en la producción de sus últimos Smartphone, cuyas ventas han incrementado exponencialmente. Estas cifras fueron generadas en ventas tanto de Smartphone como de otros componentes como módulos de memoria, pantallas y procesadores.
Con estas cifras de más de $69 mil millones de dólares, en definitiva, el departamento de componentes de Samsung, se puede considerar como fundamental, si tomamos en cuenta a su más grande competidor que es INTEL, los Surcoreanos se llevaron la ventaja por más de $9 mil millones de dólares
Aunque el enfoque de Intel se centra directamente en el mercado más rentable de los procesadores x86, que resultó en $ 63 mil millones de ingresos durante 2017. Samsung logró hacer que Intel no fabricara todo, fabricando desde módulos de memoria de computadora hasta los procesadores móviles Exynos.
Hace algunas décadas, Intel creó el negocio de la memoria informática, pero lo abandonó después de la crisis de las empresas de electrónica japonesa. Pocos años pasaron y Samsung autorizó la producción de la tecnología. Ahora Samsung usa la corona como el mayor fabricante de chips del mundo por sus ingresos, gracias a la falta de persistencia de Intel.
