La cantidad de smartphones en el mercado es impresionante, esta revolución tecnológica nos ha llevado a cifras que hace algunos años no imaginábamos, actualmente es común que contemos con uno o dos dispositivos en nuestro poder y es que entre este mercado tan amplio es difícil decidirse por una compañía u otra o simplemente la necesidad de ocupar más de un celular.
Todos entendemos <<o al menos eso doy por sentado>> a qué nos referimos cuando hablamos sobre celulares chinos, nos trae a la mente imágenes de todas esas marcas desconocidas y de bajo precio que podemos encontrar en tiendas como Elektra, Coppel o inclusive anunciados en los camiones repartidores de agua en la Ciudad de México y otros tantos estados… sí, es la imagen que se ha creado en torno a estos dispositivos.
Debemos dejar algo claro, actualmente, todos los dispositivos podrían calificar bajo el estigma de chinos, ya que, inclusive los grandes fabricantes como Samsung, Apple o LG dependen de la mano de obra y módulos fabricados en Asia, no siempre China, pero sí en la mayoría de las ocasiones, entonces, ya resulta absurdo calificar como “chinos” a los dispositivos “chafas”, sin embargo, es el modo en que nos acostumbramos a llamarlos.
Hace un par de días le preguntaba a mi hermano qué opinaba sobre la marca de smartphones Blu, su respuesta fue “son chinos, salen mal” justo lo que pensé y respondí fue “todos los celulares son fabricados en China”, entonces, uno de los principales males que aqueja a estos dispositivos es al momento de las reparaciones: la falta de refacciones. Y es común recurrir a centros no autorizados ya que los daños que sufren no siempre pueden ser cubiertos por la garantía.
Entonces, este aspecto, el de encontrar piezas para reparar celulares fabricados por Samsung, HTC, LG, Motorola, Sony o Apple, es una parte vital para la selección de algún smartphone, después del año de garantía necesitamos asegurar que nuestro teléfono podrá seguir vivo a pesar de todas las adversidades y diferentes accidentes que le puedan ocurrir, un punto a favor de los grandes fabricantes.
Las especificaciones como las cámaras que se incluyen o los procesadores son aspectos que han quedado en el pasado, actualmente, estos fabricantes chinos ya incluyen en sus dispositivos diferentes módulos que no le envidian nada a la competencia. Ahora los podemos encontrar con procesadores Snapdragon o inclusive con lentes fotográficos fabricados por Sony, la competencia ahora parece justa.
Brillan los nuevos dispositivos “chinos”
Durante el Mobile World Congress nos encontramos con diferentes sorpresas de este mercado, tal fue el caso de Xiaomi con la presentación del Mi 5, las especificaciones de este smartphone no les piden nada a los monstruos de la competencia como el Galaxy S7 o el LG G5. El crecimiento de la compañía y de sus ventas es evidente, en la preventa este dispositivo logró 17 millones de reservas, esto pensando en que los lugares en que se comercializó son pocos.
Lo mismo sucede con el nuevo Huawei P9 y P9 Plus que fueron anunciados de manera oficial el 12 de abril en Londres. Un smartphone que pretende destronar a los celulares fabricados por Sony y sus lentes que han ganado gran fama, en esta ocasión, Huawei ataca al mercado con lentes fabricados por Leica, una importante empresa alemana especializada en el apartado de fotografía. Según lo dicho por la compañía, el P9 es capaz de captar un 90% más de luz que un Galaxy S7 y 270% más que un iPhone 6s.
Por último, pero no menos importante, nos encontramos a Meizu que recién ha hecho oficial el Meizu Pro 6, sin duda, esto marcará un antes y un después en la telefonía móvil y los procesadores que se incluirán en las siguientes generaciones, ya que cuenta con un procesador de diez núcleos Helio X25 de MediaTek. Lo mejor de la combinación de las familias MX y Pro de la empresa.
Estamos hablando de los buques insignias de cada compañía, es decir, el tope de gama en los tres casos, a pesar de esto, los precios no son equiparables en ningún momento contra las grandes empresas, el precio del Xiaomi Mi 5 es de $300 dólares, el Huawei P9 $649 dólares <<versión de 32 GB>> mientras que el Meizu Pro 6 costará $386 dólares aproximadamente <<versión de 32 GB>>>.
Un problema mayor es que estos dispositivos difícilmente llegan a América, el único modo de conseguirlos es mediante ciertas páginas que ofrecen el servicio de importación de este tipo de dispositivos. Esto implica un riesgo mayor, ya que los problemas con Aduana y la pérdida de paquetes resulta ser el pan de cada día para los usuarios que optan por adquirir estos productos, pareciera que no nos encontramos ante una libre competencia ¿No?
Las opciones que tenemos con los operadores telefónicos de nuestro país son limitadas, las marcas como Samsung, LG, HTC, Sony y Apple se han apoderado del territorio mexicano, los contratos con los operadores limitan nuestras posibilidades y no dan la oportunidad a estos fabricantes para entrar de manera fácil al mercado. Muchas personas jamás se enteran de estas alternativas que resultan mucho más económicas y con especificaciones parecidas a lo que se ofrece en la actualidad.
Como ya citaba al inicio, empresas como Elektra o Coppel se han empeñado en tener en sus aparadores diferentes opciones de celulares chinos, pero los productos que apreciamos nos reafirma la negativa ante este sector tan reducido, con aspecto no tan agradable o especificaciones que dejan mucho que desear inclusive a las gamas bajas, hace falta darle una oportunidad a los grandes dispositivos que no envidian nada a las empresas mejor consolidadas.