Durante el IFA de este 2014 mucho fabricantes se han hecho presentes y han hecho muchos lanzamientos interesantes y muy esperados. Pero especialmente Samsung ha brillado por los lanzamientos que ha hecho, mostrándonos varios productos que ya conocíamos y otros tantos que se estaban esperando como su nueva Galaxy Note 4, la phablet que, aunque a muchos no les guste admitirlo, todas las demás phablets aspiran a superar. Al menos eso es lo que Samsung piensa, y quiere hacer creer a toda la industria que compite con ella. Durante su evento, Samsung parece que trató a su Note 4 con cuidado, mucho más cuidado, e incluso con un tipo de reverencia. Actualmente Samsung tiene ya lo suyo con los Galaxy S, pero necesita expandirse. Sabemos que esa es la clave dentro de la industria: expandirse o morir. Si eres un fabricante y no estás haciendo nuevos productos en nuevas líneas de productos, lo que eventualmente te ayudara a alcanzar nuevos clientes, no duraras lo suficiente dentro de la industria. Eso lo sabe Samsung y ha estado en la industria lo suficiente como para saberlo, y está aplicando este concepto en sus diferentes ofertas tecnológicas. Con esto es que las cosas se vuelven un poco incomodas.
Durante su evento Samsung estreno dos dispositivos que destacan bastante sobre los demás: El Gear S y el Galaxy Note Edge. Uno de ellos es un wearable, que tiene a sus seguidores y sus detractores, y el otro es un phablet con la particularidad de tener un costado curvo y táctil, algo que hasta ahora no se había visto en la industria. Y por supuesto se encuentra la Galaxy Note 4 original, por así llamarla, que en esta ocasión se ve y mejor que nunca. Claro los cambios son mínimos, pero creo que estos han llegado en donde eran necesarios. Y es aquí donde el Note Edge se añade a la ecuación. En termino de especificaciones son idénticos, mismo procesador, misma cantidad de ram, misma capacidad de almacenamiento. Son solo dos grandes diferencias: la batería, donde la Edge es un poco más pequeña y la pantalla que añade ese costado curvo. Pero es en este momento cuando a mi mente salta la pregunta ¿Por qué Samsung simplemente No lanzó a la Note Edge como la Note 4?
Y si me hago esta pregunta es porque viendo al Note 4 es más de lo mismo, o como yo lo veo una simple actualización al mero estilo de Apple. En cambio la el costado curvo de la Note Edge representa un enorme, por no decir monumental, avance y que pone a la Note Edge por encima de cualquier otro dispositivo. Cuando lo ponemos así suena un poco extraño pero les daré la respuesta, al menos la que yo encuentro la más lógica, es porque la marca Note ya se encuentra establecida, reconocida y es un estándar dentro de la industria, la gente conoce la marca, la gente ama la marca, la gente compra la marca. Haciendo actualizaciones “incrementales” a sus modelos anteriores hace que todo lo anterior dicho cobre mucho más sentido.
A la gente que le gustó la Note 3 se sentirán igual de cómodos cuando adquieran la Note 4, ya que no hay nada exageradamente nuevo, no hay nada que cambie la experiencia de uso dramáticamente, y es donde la Note Edge cambia todo, porque es diferente y en muchas ocasiones en la industria algo nuevo o diferente puede ser malo y si eso es malo puede reflejarse en pocas ventas y si tiene pocas ventas se convertirá en un lanzamiento fallido.
La Note Edge esta llena de varias y muy curiosas cualidades, las cuales aun falta que sean bien recibidas por los usuarios y por la industria en general. La Note Edge llega como un experimento por parte de Samsung, para tentar al mercado a probar algo nuevo. Si todo sale a pedir de boca no dudemos que veamos sus cualidades adaptadas a otras lineas de Samsung y que otras marcas adopten estas cualidades en futuros lanzamientos. Si no es así, simplemente Samsung y la industria olvidaran a la marca Edge y hasta ahí quedara su legado.
