Uno de los grandes problemas de los smartphones en la actualidad es su poca resistencia a las caídas, golpes y al agua, pues son contados los fabricantes que realmente diseñan equipos con certificaciones que nos permitan utilizarlos en situaciones extremas.
Sin embargo, siempre existen algunas excepciones, pues hay un pequeño nicho de usuarios que requiere de equipos sólidos y diseñados para resistir cualquier embate al estar trabajando en zonas de construcción o en lugares donde fácilmente un smartphone tradicional no podría resistir.
Un equipo resistente no tiene que ser un equipo básico en hardware, pues existe un smartphone que integra una pantalla de 4.7 pulgadas con resolución de 1,280 x 720 pixeles acompañada de un procesador Helio P10 de ocho núcleos a 2 GHz con 3 GB de RAM y un almacenamiento interno de 32 GB expansible con microSD, el nombre de este equipo es Blackview BV6000.
Este terminal también cuenta con una cámara principal de 13 megapíxeles y un sensor frontal de 8 megapíxeles para tomar fotografías de buena calidad. Aunado a ello cuenta con una gran batería de 4,500 mAh para alimentar todo el hardware que a su vez es administrado por Android 6.0 Marshmallow.
Mención aparte merece la certificación IP68 que posee el Blackview BV6000 para que funcione sin problema bajo el agua y resista el polvo, además, su diseño es engomado en todo el contorno del equipo, razón por la cual podremos evitar daños por caída o golpes fuertes.
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