Si eres de los que no están listos al momento en que llega el Uber y te amparas en los cinco minutos de tolerancia… pagarías el precio de que el conductor te espere, ya que se está probando una modalidad donde se pena la espera.
En algunas ciudades de Estados Unidos (Nueva York, New Jersey, Phoenix y Dallas), si el conductor espera más de dos minutos, empezará a correr la tarifa del traslado. También aplica para cancelar la solicitud en ese mismo lapso. Este programa será evaluado en las próximas semanas antes de decidir si se aplicará a otros mercados, por lo que desde ahora si sueles demorarte, debes empezar a practicar…o pagar.
El problema que presenta esta política es que en el algoritmo no siempre funciona bien y marca que el conductor ha llegado cuando a veces está una cuadra lejos o a un minuto de llegar, siendo injusto que lo cuente dentro del tiempo de tolerancia, ya que si la demora es por culpa del tráfico, el usuario terminará pagando el tiempo extra aún si está esperando el servicio en la calle. Tampoco sería justo con las personas que tardan en entrar por problemas motrices o de visibilidad, en donde el chofer no los esperaría, teniendo que pedir otro servicio.
En UberPool la espera siempre ha sido de dos minutos pero la cancelación se cobra a $2 USD. Lyft espera cinco minutos pero las penalizaciones por cancelación se cobran de $2 a $5 dólares, pero el tiempo de espera similar al Pool de Uber, es de tan solo un minuto. Así que es mejor estar preparado para pagar extra o mejor pedir el servicio cuando se esté listo, por si acaso.
Uber alega que el tiempo de los conductores es invaluable, por lo que se espera que cuando se solicita el servicio, estén listos o seguros de que realmente lo necesitan para evitar cancelaciones o perder el tiempo, siendo una recompensa para los choferes por esperar o perder tiempo y dinero en un servicio que se cancela.
Con información de TechCrunch