Seamos honestos, a pesar de que Chrome es un navegador que ofrece muchas funciones y características, además de que es muy utilizado por millones de usuarios alrededor del mundo, este no es perfecto, y mucho se debe a su excesivo consumo de memoria.
Por el contrario, Microsoft con su nuevo Edge se encuentra en el polo contrario, pues este es mucho más estable, rápido y seguro, sobre todo en Windows 10. De esta manera, se dice que para solucionar el gran y eterno problema que tiene Google con Chrome, la empresa de Mountain View pedirá ayuda de su eterno rival.
Desde la actualización de mayo de Windows 10 está habilitada la funcionalidad llamada SegmentLeap que ya está integrada en Edge y que ocasiona que dicho navegador evite el excesivo consumo de la RAM. Google pide a Microsoft que cambie una serie de elementos de su sistema operativo para que permita que Chrome no consuma tanta memoria RAM.
SegmentLeap ha conseguido reducir en un 27% el uso de la memoria en el nuevo navegador Edge, por lo que es muy importante para Google que su eterno rival en Windows pueda ganar más cuota de usuario por el simple hecho de que es más rápido y no consume muchos recursos.
Ya veremos si Microsoft concede las peticiones de la gran G o hace caso omiso, esto lo sabremos en futuras actualizaciones del sistema Windows 10.
Con información de Windowslatest
