En varias partes del mundo Uber ha estado en el “ojo del huracán” por sus problemas con la ley por el servicio que ofrecen, en donde los conductores entran en conflicto con los taxistas. Eso es “normal” hasta cierto punto, pero la noticia que ha sorprendido es que su CEO, Travis Kalanick, ha dejado el puesto de forma temporal.
El CEO, quien de forma trágica perdió a su madre en un accidente la semana pasada y su padre se encuentra seriamente herido, ha decidido tomarse un tiempo para estar en duelo, por lo que el cuerpo directivo le ha disminuido sus deberes y limitado sus decisiones. Después de que termine dicho período, regresará a la empresa, para decidir el rumbo por tomar y cómo tomarlo, para ser el líder que la empresa necesita y los usuarios merecen.
En Estados Unidos, la empresa se ha visto afectado por escándalos concerniente a acoso sexual no solo entre usuarias, sino dentro de la organización, motivo que desencadenó una serie de recomendaciones para cambiar los lineamientos, con una víctima en el proceso, David Bonderman, quien era el director de la misma, al emitir comentarios sexistas durante la reunión donde se trataba dicho tema, cuyo audio se filtró. Por si fuera poco, Emil Michael, vicepresidente senior de negocios, también se fue, siendo reemplazado por David Richter. Prácticamente todo el cuerpo directivo se ha ido: el expresidente Jeff Jones, el que fue jefe de finanzas, Gautam Gupta, más el vicepresidente senior de ingeniería e Inteligencia artificial Anthony Levandowski.
Debido a la cultura tóxica que hay en el interior de la empresa, después de una serie de sugerenciass emitidas por la firma encabezada por Eric Holder, quienes se encargaron de evaluar el clima laboral, las cuales han sido aceptadas, Uber busca limpiar su imagen, sobre todo, después de despedir a 20 empleados administrativos por acoso sexual y discriminación, la semana pasada.
Entre las recomendaciones que se dieron, está la de analizar y reubicar las responsabilidades del CEO de la empresa, implementar la igualdad de género, agregar más mujeres al cuerpo directivo para mejorar la cultura organizacional, promover justicia y precisión además de evitar repetir los errores, para ganar de nuevo la confianza entre los empleados, conductores y usuarios. Esperemos que esto sea cierto, y se aplique a nivel mundial, ya que en México los exconductores por lo general han expresado que sienten que no son tomados en cuenta.
Con información de Uber, Recode y Venture Beat
