Sony Tablet S en México – Análisis

Hace un par de meses, Sony presentó de manera oficial en nuestro país una de sus tablets con Android “Honeycomb”, la Sony Tablet S, la cual ya había sido presentada internacionalmente el mes de abril en un evento en Japón junto a su hermana, la Sony Tablet P (en ese entonces se anunciaron como Sony Tablet S1 y Sony Tablet S2, respectivamente), cuya característica principal es su form-factor, que a diferencia de la Sony Tablet S y el resto de tablets con Honeycomb en el mercado, es de tipo “clamshell”, muy similar al smartphone Echo de Kyocera, que por cierto tenemos a la venta en nuestra tienda de smartphones.

En la semana nos enterábamos a través de Sony Inglaterra que la compañía japonesa tiene ya planeado liberar la actualización de las Sony Tablets, que actualmente corren con la versión 3.2 “Honeycomb” de Android, a la más reciente versión de Android para smartphones y tablets, Android Ice Cream Sandwich que actualmente está disponible de manera oficial únicamente en el más nuevo smartphone “buque insignia” de Google, el Samsung Galaxy Nexus (también disponible en nuestra tienda de smartphones), aunque Sony no dio una fecha aproximada, pero estimo que será a mediados de 2012.

Pero el tema de este post no son las actualizaciones de Android, sino la Sony Tablet, la cual he tenido, utilizado, y analizado extensivamente por alrededor de un mes y medio, hasta cierto punto utilizándola como tablet principal a diario. La experiencia con la tablet ha sido variada, y es por ello que decidí redactar este análisis en PoderPDA, dando a conocer los distintos aspectos de esta atractiva tableta, la experiencia que he tenido, y por supuesto, mi opinión.

Cuando la Sony Tablet S fue anunciada en nuestro país, yo no tenía planeado adquirir a corto plazo una tablet (con el SO que fuera, BlackBerry OS, Android en sus variantes, iOS, incluso webOS), pues la experiencia que he tenido con mi iPad de primera generación ha sido más que grata y ha rendido frutos, más específicamente les puedo decir que durante poco más de un año ha sido el equipo que utilizo a diario en la escuela y también cumple excelentemente las funciones de entretenimiento cuando las requiero, incluso mi madre cuando tiene oportunidad la utiliza para leer, cosa que le resulta muy cómoda por la facilidad de cambio del tamaño de fuente y de brillo de la pantalla, siendo que desde la infancia sufre de problemas de visión severos (cosa que me heredó).

Pero sabía que si por alguna razón decidía adquirir una tableta a corto plazo, estaría entre las siguientes: una Acer Iconia Tab A500 debido a su bajo precio en relación a competidores como Samsung Galaxy Tab 8.9 y 10.1, Motorola Xoom, así como especificaciones y funciones muy similares respecto a estas; una Samsung Galaxy Tab 8.9, por su delgado y ligero diseño, tamaño ideal, y buena integración con Honeycomb; y como última opción, un iPad 2, para continuar con iOS sin problemas de migración a otro Sistema Operativo (en cuanto a tablets), también basado en mi experiencia con el iPad 1. Pero insisto, est0 no era prioritario para mí, y tenía planeado que a mediano plazo cambiaría por un iPad 3 (que aún no ha sido confirmado pero es bastante predecible), o por alguna tablet con Ice Cream Sandwich de fábrica (antes de que fuera anunciada la Asus Transformer Prime).

Todo esto cambió parcialmente una vez que la Sony Tablet S fue presentada en nuestro país a finales de octubre de este año, y cambió totalmente una vez que pude “conocerla” y probarla a fondo aunque de manera rápida en una tienda Sony, en que su diseño, comodidad para sostener con las manos o en las piernas para escritura o tecleado, y buena integración con Android y el software propietario de Sony, realmente me cautivaron y me vi convencido de adquirir una, por lo que al poco tiempo compré en preventa la versión de 16 GB, y para el día en que estuvo disponible al público, el 17 de noviembre, yo estaba recibiendo mi Sony Tablet S (así como una base de carga y 10 canciones, como regalo por preventa), de hecho grabé el unboxing para Tecnodiva.

Es un hecho que la Sony Tablet S llegó a México como un excelente competidor y se mantiene como tal, pues si comparamos su precio con otras tablets similares (Samsung Galaxy Tab 10.1, Motorola Xoom) disponibles en el mercado nacional, y que sus especificaciones de hardware son prácticamente iguales, con algunas pequeñas diferencias, realmente la Tablet S de Sony se coloca en los primeros lugares del top 10 de tablets en México.

Es de llamar la atención el hecho de que Sony México decidiera colocar la Tablet S en un rango de precios tan competitivo (7,000.00 MXN la de 16 GB, $8,500.00 MXN la de 32 GB), pues como sabemos, siempre se ha caracterizado por ofrecer excelentes productos a precios muy altos, en ocasiones estratosféricos (incluso mayores que los de Apple), cosa que personalmente he visto en su línea de pantallas BRAVIA, notebooks y desktops VAIO, Home Theaters, reproductores Blu-Ray, y demás.

Pero Sony en esta ocasión está buscando ocupar el segundo lugar de ventas de tablets en México, y lo hace a través de su estrategia de precios y de un lanzamiento ideal para la temporada navideña, y dado el buen prestigio que en general tiene esta marca japonesa en nuestro país, pueden ser un factor importante para que Sony lo logre.

La caja de la Sony Tablet S es relativamente grande, algo de esperarse ya que es una tablet, no un smartphone, y no escatima en recursos, pues incluye una buena cantidad de papeles (afortunadamente no se incluye un enorme manual de usuario). Además de la tablet y los ya clásicos papeles de Garantía, información importante y de seguridad, y guías rápidas, la caja incluye un cargador de tamaño considerable, de hecho es muy similar a un cargador de laptop o de un PSP.

Asimismo, viene incluída una pequeña correa de tela para poder colgar la tablet en la muñeca, o mejor dicho, para mayor seguridad y en caso de alguna caída accidental del equipo mientras se sostiene, evitar daños. Sony no incluye ningunos audífonos ni nada parecido, algo de llamar la atención, pues cuenta con un jack de 3.5 mm y sus capacidades multimedia lo ameritan, pero lo que es realmente sorprendente, y esto para mal, es el hecho de que tampoco incluye ningún tipo de cable microUSB, algo hasta cierto punto indispensable para gran parte de los usuarios que constantemente necesitamos transferir archivos, ya sean imágenes, videos, o documentos.

Hardware

Lo primero que pude notar al sacar la Sony Tablet S de su caja, fue su hermoso diseño en forma de revista doblada, el cual ha sido bien recibido en general tanto por usuarios como por editores de otros medios, aunque criticado por algunos, e incluso ha sido sujeto de bromas. En este diseño podemos apreciar que se trata de un producto totalmente Sony, algo notable principalmente en sus bordes que me recuerdan a los de una laptop VAIO.

También, podemos notar su pantalla y el hecho de que tiene un aspect ratio de 16:10, muy cercano a un aspect ratio óptimo de 16:9 lo cual es más que ideal para el ojo humano, aunque por el tipo de equipo que es la Sony Tablet S, pienso que Sony debió haber incluído un panel Gorilla Glass, pues está muy expuesta a sufrir de alguna rayadura, o algún golpe accidental, incluso con el borde de alguna mesa en que sea colocada. Antes de continuar, repasemos sus especificaciones técnicas.

Especificaciones Técnicas Sony Tablet S

Si bien la tecnología que se eligió para fabricar la pantalla de la Sony Tablet S fue una TFT-LCD, y no algo más novedoso como OLED, AMOLED, o Super AMOLED en sus distintas variantes, ni siquiera la tecnología IPS-LCD (vista en el iPhone 4/4S, y en el LG Optimus 2X), es de gran ayuda el hecho de utilizar “TruBlack”, tecnología propietaria de Sony que ya hemos visto en recientes pantallas BRAVIA y que permite colores mucho más vivos, con mayor nitidez y mejor contraste, y como su nombre lo dice, colores negros que se acercan a un verdadero tono negro (sin color), nada de tonalidades de gris, y es importante mencionar que al estar en uso, permite buena visibilidad desde distintos ángulos sin ser IPS.

En cuanto a su diseño, es cierto que la forma de revista permite mayor confort al momento de sostenerla, ya sea con una o dos manos, y además este diseño hace que su centro de gravedad se coloque más cerca de la parte más gruesa del dispositivo (o el doblez de revista, por así decirlo), lo cual se traduce no solamente en mayor facilidad de agarre, sino en que las fuerzas que se deben aplicar para sostener la tablet (torques o momentos) son mucho menores que en otros equipos, algo específicamente notorio al sostener la tablet con una sola mano.

La solidez de esta tablet es muy buena, a pesar de estar construida en su totalidad de plástico en el exterior, pues es muy resistente, no presenta ningún chasquido ni chirrido al aplicar presión o torsión, y he de mencionar que resiste perfectamente a las caídas, cosa que accidentalmente comprobé en una ocasión, pues en mi espacio de trabajo moví el monitor de una de las computadoras que ocupo, esto para echar un vistazo al módem que se ubica detrás (pues mi servicio de Internet estaba fallando), y en ese momento el monitor golpeó a la tablet y la hizo caer de mi escritorio, pero reitero que sobrevivió perfectamente, sin siquiera algún rasguño o rayón, y continúa funcionando normalmente.

Como cualquier tablet con Honeycomb, la Sony Tablet S no cuenta con algún botón físico en su parte frontal, pues la interacción con el sistema se hace mediante los botones virtuales de Android. Algo que de inmediato podemos notar, es la cámara frontal para videoconferencias, que en este caso está colocada en la parte frontal superior, exactamente al centro, a diferencia de tablets como la Toshiba Thrive cuyas cámaras se ubican en la parte lateral (superior si la colocamos en modo vertical).

En el borde derecho de la Sony Tablet S, encontramos el botón de encendido/apagado, o bloqueo/desbloqueo, así como los botones de volumen de audio, y también podemos ver un botón “Reset” que funciona para hacer un reboot o reinicio de la tablet en caso de que no se pueda apagar de manera normal; este botón funciona también como una pequeña luz que se enciende cuando la tablet está conectada e indica una vez que el proceso de carga se terminó de realizar. Además, la Sony Tablet S cuenta con un LED verde de notificación, el cual parpadea siempre que llega alguna notificación Push o similar, y que se encuentra oculto bajo el plástico gris del borde, por lo que cuando se enciende la luz se transluce a través de dicho plástico, y cuando está apagado, no se nota en lo absoluto.

Por su parte, en el borde izquierdo se ubica el jack de 3.5 mm para auriculares (a la altura del LED de notificación), y debajo se encuentra una pequeña puerta que al ser abierta mediante su pestaña, revela el conector microUSB 2.0 el cual sirve exclusivamente para transferencia de archivos, no para cargar el dispositivo; asimismo, junto al conector microUSB se ubica un slot para tarjetas SD convencionales, no microSD como estamos acostumbrados a ver en equipos móviles como smartphones y tablets, lo cual puede ser de gran ayuda ya que estas manejan precios más accesibles; lamentablemente, si agregamos una tarjeta SD no funciona para aumentar el tamaño de almacenamiento de la tablet, pues únicamente sirve para transferir archivos entre la tablet y la tarjeta de memoria.

La parte trasera de la Sony Tablet S tiene casi en su totalidad un diseño plástico negro, cuya superficie es texturizada aunque no precisamente rugosa, podríamos decir que tiene diminutos puntos que apenas sobresalen, distribuídos uniformemente. En la parte superior  encontramos a los lados dos pequeñas gomitas que funcionan como “patitas” para sostener a la tablet en la superficie en que sea colocada y proporcionar mayor fricción y agarre, mientras que al centro encontramos la cámara principal. En el borde de esta parte negra se encuentra el logo de Sony del lado izquierdo, y un diminuto logo de PlayStation (el que tiene los clásicos cuadrado, triángulo, cruz, y círculo).

Un poco más abajo, donde termina la parte negra, comienza una parte gris (la otra parte de la revista), en la cual se encuentra impresa la información del modelo (SGPGT111MX/S), voltaje máximo, así como el sello de la Norma Oficial Mexicana (NOM) y de NYCE, mientras que en el lado derecho  se encuentra una etiqueta removible con el número de serie y duración aproximada de la batería, y colindando con el borde lateral de la tablet, están las ranuras para introducir la correa de seguridad ya mencionada. Debajo y formando parte del borde inferior, podemos encontrar el conector propietario de Sony para la carga del dispositivo, y he de mencionar que es un poco complicado conectar el cargador, ya que cuenta con dos “picos” de plástico para asegurar el equipo.

El tamaño de la Sony Tablet si lo comparamos con el de un iPad de primera generación es muy similar en el eje horizontal, mientras que en el eje vertical es más pequeña, pues además de poseer una pantalla más pequeña, en general la estructura no es tan grande, salvo en su grosor que se disminuye gradualmente de la parte superior a la parte inferior de la Sony Tablet S.

Hablando de la batería de la Sony Tablet S, yo esperaba que su duración fuera de por lo menos 12 horas de uso continuo, y de poco más de dos días (48 horas) en espera; desafortunadamente esto no es así, pues a lo mucho dura 4 horas en uso continuo e intensivo, y 12 horas en espera, con usos esporádicos. Pienso que los principales problemas de esto pueden ser su pantalla LCD, ya que este tipo de pantallas consumen demasiada energía, así como alguna mala optimización de Sony, que bien podrían arreglar en alguna futura actualización de software.

Algo en lo que destaca la Sony Tablet es su cámara principal, que aunque es de 5 megapixeles, captura fotografías de buena calidad gracias a su sensor EXMOR, pero sin duda es una gran desventaja el hecho de que no incluye flash de ningún tipo para iluminación en caso de encontrarnos en situaciones de poca o nula luz para nuestras fotografías. Entre las opciones para capturar fotografías que la Sony Tablet S ofrece, están las del tamaño de la imagen: 5 megapixeles con resolución de 2592×1944 pixeles y aspect ratio de 4:3, 3.6 megapixeles con resolución de 2560×1440 pixeles y aspect ratio de 16:9, 2 megapixeles con resolución de 1632×1244 pixeles y aspect ratio de 4:3, 2 megapixeles con resolucuón de 1920×1080 pixeles y aspect ratio de 16:9, y por último VGA con resolución de 640×480 pixeles.

Respecto al zoom digital, permite un acercamiento máximo de x8, y también podemos activar o desactivar el geo-etiquetado de las fotografías, y cambiar algunos ajustes como la exposición (desde -2 hasta +2), el balance de blancos (automático, incandescente, fluorescente, luz natural, y nublado), escena (desactivado, documento, paisaje, retrato, deportes, y playa/nieve), así como el modo de enfoque (automático, macro, macro fija, e infinito). A continuación algunas fotografías que capturé para poder dar una mejor idea de las imágenes que puede obtener la tablet (clic en cada imagen para ver en tamaño completo).

Pero indudablemente, el aspecto en el que esta cámara realmente muestra sus capacidades, es para la grabación de video. La calidad de imagen lograda es impresionante para ser una tablet, ya que el hecho de incluir una cámara es un extra para este tipo de dispositivos, pues debemos ser realistas, es algo complicado (y sumamente ridículo) el hecho de tomar fotografías o videos con un dispositivo de semejante tamaño como lo es la Sony Tablet S.

Sea lo que sea, Sony incluyó una excelente cámara para grabar videos en HD 720p a 30 cuadros por segundo, y ya que se obtienen tan buenos resultados, sería de esperar que el audio de dichos videos fuera el óptimo y estuviera acorde con la calidad de video obtenida, pero desgraciadamente esto no es así, pues al final del día el audio obtenido al grabar video es simplemente pésimo, tal parece que el o los micrófonos que incluye no son ni un poco buenos, de hecho la calidad es peor que la de una llamada telefónica con algún smartphone. ¿De qué sirve capturar tan buenas imágenes en un video, si el audio es deprimente?

A continuación algunos videos que grabé de día y de noche para que juzguen ustedes mismos. (Recomiendo verlos en pantalla completa en HD 720p, la máxima calidad a la que la Sony Tablet S puede grabar video).

Software

La versión de Android que la Sony Tablet S incorpora es una de las más recientes, la versión 3.2 “Honeycomb” para tablets. Dado el hecho de que es un dispositivo Sony, sería lógico pensar que corre alguna interfaz Timescape optimizada para tablets, así como el resto de personalizaciones y características añadidas que en la división de móviles, Sony Ericsson, se añade a la línea de smartphones Xperia, tales como Facebook Inside Xperia, Sweep Panorama 3D, entre otras.

Afortunadamente para los usuarios más exigentes y conocedores de smartphones, tablets, y dispositivos móviles en general, esto no es así, pues la interfaz nativa de Honeycomb se ve ligeramente modificada, y dichas modificaciones podríamos decir que son para bien, pues en verdad mejoran la experiencia de uso del sistema en la Tablet S, incluso haciéndola en ocasiones más rápida y fluída, o mejor dicho, facilitando su uso. Pero antes de adentrarme en estas cuestiones, debía probar el rendimiento teórico de la tablet, haciendo la ya clásica prueba de Benchmark que en PoderPDA realizamos a los smartphones y tablets que analizamos, o bien de los que hacemos algún hands-on; a continuación pueden ver un screenshot (clic para ver en tamaño completo).

Como habrán visto, la Sony Tablet S obtuvo un puntaje de 1621 en Quadrant Standard, algo que podría parecer bajo para ser un dispositivo con un procesador Nvidia Tegra 2, que es de doble núcleo, pero no debemos olvidar que es una tablet, no un smartphone, por lo que cuestiones como el tamaño de la pantalla pueden mermar los resultados de la prueba. Además, existe un aspecto sumamente importante y que estoy seguro la mayoría de los usuarios conocedores saben, y es que al final del día, la experiencia de uso y la productividad que se pueda obtener de ella, es lo que realmente marca la diferencia. Es por ello que en las siguientes líneas podrán encontrar este importantísimo aspecto.

Las personalizaciones principales hechas por Sony en esta tablet son, en primera, una especie de dock pequeño para acceso rápido a aplicaciones, ubicado en la parte superior izquierda de la interfaz; el máximo de aplicaciones que se pueden acomodar en esta área es de cuatro, y por defecto vienen acomodados el navegador de Internet, la app de Email, el Mando a Distancia, y el Lector de Feeds Sociales, los cuales se pueden mover fácilmente y cambiar por las apps que utilicemos realmente a diario. La segunda personalización principal que Sony ha hecho en la Tablet S, es un acceso directo ubicado junto al app launcher, y este abre una app no accesible desde el app drawer, llamada “Favoritos”, que nos permite echar un vistazo rápido y abrir nuestros juegos, las canciones que más escuchamos, los videos que más vemos, nuestros marcadores del navegador, los últimos posts en redes sociales, libros más leídos, historial de navegación, entre otros; esta sección es personalizable.

Por último, la tercera modificación más importante realizada por Sony en la tablet, es en el app drawer, es decir, la parte de la interfaz que nos muestra todas las aplicaciones instaladas en el dispositivo y abrirlas. El app drawer en la Sony Tablet cambia el color transparente y el desplazamiento horizontal, por un color blanco, en cuyo fondo parece haber “repisas” para cada aplicación, el desplazamiento es vertical, y de hecho al hacerlo rápidamente, pareciera que los íconos toman un efecto 3D: al navegar de arriba hacia abajo (deslizando el dedo de abajo hacia arriba), el conjunto de apps se inclina hacia atrás, y cuando se desplaza en sentido contrario, el conjunto de aplicaciones se inclina hacia adelante, esto es un efecto muy agradable pero innecesario, asimismo, se nos permite ordenar las apps a nuestro total gusto y antojo, además de poder agregar “separadores” para tener nuestras apps ordenadas por categorías o clases, si así queremos llamarlo. Esto no me fue posible ilustrarlo debido a que la app que utilicé para los screenshots, que es No Root Screnshot It, por alguna razón al hacer la captura mostraba una pantalla negra totalmente (y el SDK de Android no nos permitió obtener los screenshots).

Ahora, en lo que al software preinstalado se refiere, por fortuna no contamos con ningún “bloatware” o software basura por parte de algún operador, una ventaja de que Sony no haya traído una versión con conectividad de datos (o versión 3G) de la tablet a nuestro país. Pero sí contamos con una buena cantidad de software preinstalado de Sony, parte de este complementando la experiencia de Honeycomb, y otra parte sustituyendo aplicaciones nativas del Sistema Operativo Android para tablets.

Entre estas, las que más sobresalen son un cliente de streaming DLNA (no es para montar un servidor DLNA, sino para conectarse a alguno) que funciona a la perfección con PC que tengan Windows Media Player y estén configuradas como tal. También cuenta con un buen cliente de correo electrónico, en el cual se puede configurar prácticamente cualquier cuenta de correo electrónico, al soportar protocolos como POP, IMAP, y Exchange, este último para corporativos. Asimismo, soporta Exchange ActiveSync, por lo que si aún usas y te conformas con tienes alguna cuenta de Hotmail como yo, podrás agregarla y sincronizarla sin problemas (Yahoo! tampoco da problemas).

Por otro lado, tenemos el Lector de Feeds Sociales, un ligero cliente de redes sociales (Twitter y Facebook) cuya función principal es la de leer los status de nuestros amigos o personas a quienes seguimos en dichas redes sociales, también permite ver links publicados en las actualizaciones y demás, por lo que para usuarios primerizos e incluso usuarios promedio es más que suficiente, pero, para “Social Media Experts”, Community Managers, y similares, no es ni de lejos robusto.

Al ser un producto Sony, viene con la aplicación “Reader” de la marca, para lectura de e-books y demás en formato PDF o en formato ePUB, aunque no incluye acceso a la tienda de libros de Sony. Otra aplicación incluída por Sony, es la de Transferencia de Archivos, la cual permite transferir archivos entre la tablet y algún dispositivo conectado por USB, o con alguna SD insertada. En mi caso, intenté probar la transferencia vía USB pero la tablet nunca detectó ni mi MacBook Pro ni mi PC de escritorio (aunque en esta última pude transferir archivos sin necesidad de usar dicha app, la PC detectó la tablet como un reproductor multimedia); tal parece que esta app en el caso de USB sirve únicamente para transferencia de archivos cuando la tablet es el “host”, con dispositivos como cámaras digitales, lo cual sería posible mediante un cable-adaptador USB, disponible en Sony Style por $200.00 MXN.

Respecto al navegador web de la Sony Tablet S, viene incorporado el nativo de Honeycomb, con algunas pequeñas mejoras que en teoría hacen cargar las páginas web mucho más rápido, o por lo menos permiten navegar rápidamente antes de que carguen por completo. Al utilizar dicho navegador y probarlo en distintas páginas, blogs, sitios, portales, y demás, inclusive lo probé en un editor web de WordPress, pude comprobar que si bien la velocidad es ligeramente mayor, no es algo significativo, y lo que me decepcionó fueron los constantes “crasheos” de dicha app, sin importar la situación que podía ser simplemente visitar algún blog, hasta ver un video en la versión de escritorio de YouTube en Full HD 1080p mediante Flash Player. Espero Sony arregle pronto este problema, y mientras recomendaría utilizar algún otro navegador como Firefox para tablets Android, que recién fue liberado en el Market.

Hay algo de la Sony Tablet S que me parece extraño aunque no crítico, pero sería un buen punto que se podría arreglar con alguna actualización de firmware, y es el hecho de que cada que recibe alguna notificación, el sonido de alerta se retrasa de una extraña manera, de hecho se corta; por ejemplo, nos llega un email y recibimos la notificación, pero el sonido solamente suena parcialmente, y a los pocos segundos el resto (u otra parte) y así sucesivamente; en el peor de los casos dicho sonido demora varios minutos, o termina de sonar hasta que desbloqueamos la tablet. Además, en ocasiones, no se escucha el audio de los sonidos de bloqueo, desbloqueo, y demás.

El campo en el que la Sony Tablet S realmente destaca en general, es en sus capacidades de consumo de multimedia, al soportar una buena cantidad de formatos de audio y video (aunque parece falla en algunos códecs), pero además por su fácil conectividad con dispositivos que cuenten con DLNA. La tablet puede controlar algún servidor DLNA, como ya comenté en algunos párrafos arriba, pero también puede actuar de forma nativa como un servidor DLNA, al poder transmitir contenido desde el reproductor de música, el de videos, y la galería, esto sin realizar fastidiosas configuraciones, o en el peor de los casos, realizando mínimas y sencillas configuraciones.

Esto lo pude comprobar personalmente y en repetidas ocasiones con mi PC de escritorio (una HP), así como con la Sony BRAVIA instalada en la sala de mi hogar, y en mi PlayStation 3, y en ningún momento me dio problemas. Lo más curioso es la forma en que esto se puede hacer, pues si bien la tablet no se activa completamente como servidor multimedia DLNA (para ello necesitaríamos instalar alguna app del Android Market que nos lo permitiera), la experiencia es sumamente agradable, además de como ya mencioné, sencilla. Tan solo debemos estar visualizando un video, escuchando una canción, o viendo una imagen en la tablet (en el caso de la app de música debe ser la de Sony, no la nativa de Android que por cierto soporta sin problemas Google Music), oprimir un botón que aparece en pantalla en forma de rectángulo con una flecha encima que apunta hacia arriba, esperar a que la tablet busque y encuentre reproductores DLNA en la red Wi-Fi, y por último, lanzar o arrastrar el contenido hacia el dispositivo ilustrado en pantalla; para terminar la conexión, tan solo elegimos “Desconectar”.

La Sony Tablet S también destaca de entre sus competidores en el mercado mexicano en un último punto, y este es el hecho de que incluye de manera nativa una aplicación de control remoto universal, que funciona prácticamente con cualquier dispositivo de audio y video, sin importar marca o fabricante, siempre y cuando su recepción sea vía infrarrojos, pues la tablet cuenta con un transmisor de ondas infrarrojas, que en esta ocasión sí está siendo bien aprovechado mediante dicha app nativa. Aún recuerdo cuando tuve el PSP de primera generación, conocido como “PSP Fat”, el cual contaba con un puerto de transmisión de ondas infrarrojas, pero al no tener alguna utilidad aparente de forma nativa, la comunidad de hackers y desarrolladores de software “homebrew” para dicha consola portátil, liberó distintas aplicaciones para utilizar el PSP como control remoto universal.

Hablando de PlayStation, la Sony Tablet es la primera en recibir la certificación PlayStation, lo que en un futuro próximo nos permitirá descargar o comprar, y por supuesto jugar en la tablet, distintos videojuegos clásicos del primer PlayStation, el PlayStation One. Por lo pronto, vienen incluídos un par, que son Crash Bandicoot, y un juego de Pinball, en el caso del primero se puede controlar a través de controles en pantalla que simulan un layout de control de PlayStation, y el segundo, mediante gestos táctiles en ciertas áreas de la pantalla. Si bien la Sony Tablet S fue la primera en recibir certificación Sony PlayStation, es el segundo dispositivo móvil en recibirla, pues el primero fue el Sony Ericsson Xperia Play.

Lo que me preocupa de la Sony Tablet S, es que a diferencia de muchos de sus competidores, cuenta con nulo soporte por parte de los desarrolladores y hackers no oficiales, de distintas comunidades, donde como sabemos la más prominente es la de XDA Developers, quienes constantemente buscan traer lo mejor para los dispositivos con Android principalmente, desde temas para cambiar la apariencia, pasando por diferentes aplicaciones y tweaks, hasta completas ROMs que mejoran totalmente el software y la experiencia de uso de los equipos. Para que se den una idea, el soporte de la tablet en XDA es tan escaso que ni siquiera existe aún el método para hacerle Root (u obtener el acceso Root, como le quieran llamar), y de hecho incluso ya se está llevando a cabo una colecta, prometiendo pagar todo el dinero recolectado al desarrollador que logre obtener acceso root a la Sony Tablet S y esté dispuesto a contribuir de esta manera a la comunidad de usuarios (hasta el momento llevan $800.00 USD).

Pero también debo reconocer que Sony México ha trabajado en el poco tiempo que lleva la Sony Tablet S en el mercado para traernos las actualizaciones oficiales del sistema, iniciando por la actualización de Android 3.2 a Android 3.2.1, lo cual también incluyó mejoras de la experiencia de Sony, y más recientemente de Android 3.2.1 a un release 2 de la misma versión, con más mejoras como la posibilidad de utilizar un control Sixaxix (DualShock 3) del PlayStation 3 para jugar juegos de PlayStation One en la tablet, cosa que no pude probar ya que no he tenido oportunidad de adquirir el cable necesario para conectarlo; es por ello es que confío en que Sony México con toda seguridad traerá la actualización de la tablet a Android 4.0 “Ice Cream Sandwich”.

Conclusión

La Sony Tablet S es verdaderamente un excelente producto, una excelente tablet, y su enfoque inicial que es el de consumo multimedia es muy notorio, por lo que quienes busquen una tablet para ver videos, escuchar música, visualizar imágenes, y compartirlos con su familia y amigos a través de pantallas y dispositivos con DLNA, así como fans y usuarios asiduos de productos Sony, no se verán decepcionados. Si bien puede llegar a ser usada en ambientes corporativos y escolares, pienso que no sería lo más recomendable.

Personalmente les puedo decir que en mi caso, mi Sony Tablet S no podrá reemplazar a mi iPad en el salón de clases, y no lo tomen como “Applefanboyismo”, pues siendo objetivos, a corto plazo no podría hacerlo, dado que no me brinda la estabilidad, cantidad, y calidad de apps que necesito utilizar a diario, pero no descarto que conforme se liberen más actualizaciones para mayor seguridad y estabilidad, así como para optimizar la duración de la batería, si podrá fungir como reemplazo de mi iPad.

Pero las necesidades y gustos de cada usuario son diferentes, por lo que si actualmente están buscando una buena tablet, recomendaría colocar la Sony Tablet S como una de sus tres primeras opciones, sobre todo, insisto, si lo que buscan es entretenimiento y multimedia para ustedes y su familia, de hecho puedo afirmar sería un excelente regalo para esta temporada navideña, más específicamente para el Día de Reyes.

Sony Tablet S en México – Análisis
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