Una nueva integrante en el salón de clases
Así es, desde que llegó la Dana y apareció en la cafetería, las personas a su alrededor empezaron a preguntar quien era ella.
Por supuesto, hubo quienes no se resistieron y enseguida se pusieron en contacto con ella.
El comentario general, fue alabar el teclado, su suavidad, su ergonomía para tipear, la facilidad con que se puede escribir. Definitivamente, les gustó más que el de una desktop o una laptop.
En ese momento llegó el coordinador del master y no se quedó con las ganas de abrazarla y comentar lo ligera que es.
Enseguida la llevé al salón y la senté conmigo, decidí que fuera mi compañera de silla en toda la clase.
El coordinador dio una serie de avisos, que oportunamente, Danita captó al instante.
Llegó en ese momento el profesor e inició la clase. Realmente durmió muy poco en clase, ya que se la pasó activa la mayor parte del tiempo.
Todos estaban pendientes de ella, todos la veían con curiosidad. Hasta el profesor no le quitaba la vista al ver que estaba interactuando conmigo en plena clase.
Dana se porto muy bien, siempre lista y no requirió de que se use la retroiluminación en ningún momento.
El profesor hablaba y hablaba y dada consejos sobre cómo hacer el capítulo tres de la tesis. Dana no perdió nota de todo lo que él dijo y se llevó los aspectos más importantes de la clase.
No importó que el profesor hablara rápido, ella respondió a la velocidad de sus palabras.
Dana es una compañera excelente para tomar apuntes, ni que hablar para redactar documentos en plena clase.
Estoy muy contenta de haberla llevado conmigo. Sé que la palmaggita está celosa porque se quedó guardada en la mochila en que acompañó a Dana.
Desgraciadamente, con palmaggita, a pesar de que responde y anota lo que puede, no siempre se entiende y puede capturar la misma información que se logra con Dana. Además, Danita es totalmente legible sin problema de pasar las notas. Es directa, rápida, limpia.
Su batería prácticamente no se movió. El ingreso a los datos es instantáneo
En el descanso de la clase, el resto del grupo se acercó a ver quien era la invitada.
Es una pena que solo venga de intercambio y que no pueda demostrar totalmente todo lo que puede hacer. La voy a extrañar.
Definitivamente, Dana fue el éxito de la clase, ya que los que la conocieron difícilmente vuelvan a ver a alguien como ella.
Una de las mejores compañeras para todas las clases. Una muy grata experiencia. Altamente recomendable.
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