Editorial Todo Pocket PC: ¿Los UMPC han sido un fiasco?
El gran público, ese que hace que un producto sea un éxito o no, a día de hoy hay quien aún desconoce lo que es, qué hace y cómo lo hace. Sólo hace falta hablar con los vendedores de cualquier centro comercial que los tenga en catálogo. La gente no tiene ni idea de qué carajo es ni para qué sirve ese chisme con pinta de reproductor de DVD con una pegatina que pone Q1. Otro factor importante que ha hecho que los UMPC no se hayan popularizado ha sido el precio. En las pocas tiendas en las que puedes encontrar UMPC’s en exposición han optado en la mayoría de veces por un Samsung Q1 a un precio de venta de mas de 1000 euros o el feísimo Asus con receptor GPS integrado. Encontrar durante meses lo mismo, y al mismo precio, no es alentador ni estimula las ventas.
El gran público tiene ahora mucha tecnología donde escoger. Los portátiles han bajado de precio una barbaridad y se venden incluso en supermercados, y los Tablet valen casi la mitad de lo que valían hace dos años. Aún recuerdo cuando un Toshiba de lo más básico valía no menos de 200.000 pesetas. En su página web puedes encontrar ahora mismo portátiles a 600 euros, y aunque poco tienen que ver con los UMPC, satisfacen las necesidades de movilidad de muchísimos usuarios. Los que realmente necesitan un equipo potente con pantalla táctil y tampoco saben mucho de UMPC’s tienen la perfecta opción de decantarse por un Tablet PC, que los hay a día de hoy cargaditos con tecnología punta a precio de escándalo. Vale, un Tablet PC tampoco tiene nada que ver con los UMPC, pero colma las necesidades del resto de usuarios al que se les quedaba corto un simple ordenador portátil. Así pues, los posibles compradores de un UMPC han quedado relegados a personas inquietas, ávidas de nuevas experiencias, con cierta capacidad económica, que leen mucho en Internet y que por tanto están al día de las novedades, y que buscan presuntas nuevas tecnologías invirtiendo dinero y sobretodo tiempo en adaptarse a la nueva situación diciendo adiós, por poner un ejemplo en el caso de los UMPC, al clásico teclado y usando el puntero para casi todo.
Teniendo en cuenta pues que el acceso a los UMPC es restringido al gran público debido a la pobre apuesta de los distribuidores y a la falta de conocimientos del personal que los vende, y teniendo en cuenta también que no es un producto que substituya a ningún otro desde el punto de vista del usuario de a pié, sólo quedaba en confiar en las bondades de estas máquinas para encontrar en ellas un motivo de compra. Pues al menos en la primera generación de estos aparatos no se han encontrado muchas. Mas bien al contrario, el proceso de adaptación de muchos usuarios a esta plataforma no acabó culminándose, siendo vendidos de segunda mano a precio de saldo por no haber conseguido hacerse con la nueva plataforma. La resolución de sus pantallas y la duración de las baterías son dos graves problemas que de por sí, hacen plantearse seriamente la idoneidad del producto.
Pero lejos de amedrentarse hay usuarios que realmente le han sacado un buen rendimiento a estos aparatos, eso es innegable. Algunos de forma un pelín forzada, como el caso de uno que colocaba su UMPC como navegador GPS para su automóvil, absolutamente desproporcionado para el cometido. También recuerdo otro que se compró un UMPC para tomar pedidos en sus rutas diarias, no llegándole la vida de la batería más allá del mediodía cuando antes con su portátil de 12” podía incluso llegar a casa por la noche y enviar todos los albaranes por correo electrónico a su empresa. Obviamente le vi no más de un mes con un UMPC, volvió al portátil cuando la razón pudo más que su orgullo.
¿Qué debería tener un UMPC para revolucionar el panorama actual? Un salto cualitativo respecto a la tecnología existente, así de simple. El día que presenten un UMPC con el cual sea posible trabajar diez segundos después de arrancarlo desde cero, que tenga una duración de batería aceptable, un sistema operativo a medida y una resolución de pantalla adecuada a los tiempos que corren, quizás ese día todo el mundo estará hablando de los UMPC alucinando con sus prestaciones. De mientras, que no nos intenten colar soluciones recauchutadas, con sistemas operativos no optimizados y basados en tecnologías presentes hace ya demasiado tiempo en el mercado. Tenemos muchas ganas de comprar cosas, pero por favor, señores responsables de los UMPC, inventen ustedes algo revolucionario, algo en lo que valga realmente la pena gastarse 1000 euros. Y no estamos hablando de incorporar a los dispositivos actuales HSDPA, GPS y TDT. No es eso, es algo más.