El Galaxy S20 es casi imposible de reparar
Entre más atractivo es el diseño de un smartphone su reparación suele ser mucho más complicada, ya que el proceso de fabricación suele ser muy diferente al teléfono tradicional, pues se utilizan otros métodos para tener resultados favorables.
Tal es el caso del nuevo Galaxy S20, un equipo que se ve bonito por fuera, pero por dentro sus componentes están tan perfectamente alineados e integrados que es casi imposible de reparar, sobre todo acceder a cada una de las piezas clave del teléfono.
La compañía de reparación iFixit ha despiezado el buque insignia de Samsung, dando al teléfono una puntuación de reparación de 3 sobre 10. Esto significa que su reparación es complicada, así como también el desmontaje de cada uno de sus componentes internos.
Para llegar al fondo del equipo, se debe comenzar minuciosamente quitando la cubierta de vidrio posterior. Se dice que la reparación de la pantalla requiere un desmontaje completo o reemplazar la mitad del teléfono, así que si se estrella la pantalla arreglarla te costará casi el precio de un modelo nuevo.
En su interior se nota claramente toda la magia que ha logrado Samsung en incorporar cada uno de los componentes para ofrecer un smartphone completo, con funciones increíbles y un apartado fotográfico de calidad.
Con información de AndroidAuthority