Hey Banco da cátedra de cómo llevar un banco totalmente digital y sin sucursales
El director general de Hey Banco, Manuel Rivero, tiene como objetivo presentar una institución financiera digital que sea accesible a través de dispositivos móviles y que se caracterice por ser ágil, sin excesiva burocracia y entretenida.
Migrando de sucursales a Apps
Aunque en México hay 88.2 millones de personas con teléfono celular, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el reto principal es fomentar la educación financiera y generar confianza en la banca digital para que las personas se sientan seguras al utilizar este tipo de servicios.
Manuel Rivero, afirmó que la estrategia de comunicación de la empresa incluye el involucramiento activo en redes sociales para satisfacer las necesidades de sus clientes y brindarles el servicio que esperan.
Con 1.2 millones de seguidores en todas sus redes, Hey Banco se enorgullece de su presencia en línea, que supera la de cualquier otro banco. Hey Banco fue fundado hace cinco años como parte de Banregio Grupo Financiero, una institución financiera con más de 150 sucursales a nivel nacional y casi treinta años de experiencia en el mercado.
Sin sucursales o cajeros
Desde su sede en Monterrey, Nuevo León, Hey Banco se convirtió en el primer banco digital en México, con el objetivo de brindar servicios financieros prácticos y accesibles a través de dispositivos móviles, sin la necesidad de documentos complicados.
Hey Banco ofrece una amplia gama de productos y servicios financieros, que incluyen ahorro e inversión, terminales de pago, tarjetas de crédito y programas gratuitos de educación financiera. Además, están trabajando en el lanzamiento de hipotecas y financiamientos para automóviles.
Según Manuel Rivero, el éxito de la empresa se debe no solo a su estrategia de comunicación, sino también a la satisfacción de sus clientes, quienes han recomendado la institución de manera positiva.
A pesar de no tener sucursales físicas en México, Hey Banco ha ganado cerca de nueve mil clientes semanales en 2020 y está a punto de alcanzar un millón de usuarios en tres años. Rivero enfatiza en que Hey Banco no busca ser pretencioso ni distante con sus clientes, y que el modelo de banca digital tiene sus limitaciones.
La revolución financiera en México está en marcha, impulsada por el avance tecnológico y la popularidad de los servicios financieros digitales. La banca en línea y los bancos digitales se han vuelto cada vez más comunes, gracias al creciente acceso a internet y la penetración de los teléfonos inteligentes en los últimos años.
Según la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), más de 80 millones de mexicanos tienen acceso a internet, lo que representa más del 72% de la población. Esto ha propiciado la llegada de una serie de bancos digitales y fintechs que ofrecen diversos productos financieros.
Otros bancos seguirán esta misma línea
En la actualidad, otros tres bancos se preparan para ingresar al mundo virtual. Santander México está a la espera de la aprobación de las autoridades para lanzar Openbank, un banco digital que ya opera en países como España, Alemania y Argentina.
Los cambios en el comportamiento de los consumidores han obligado a los bancos a reevaluar su estrategia de negocio, considerando el papel que desempeñarán las sucursales físicas en un mundo digital.
Para directivos de bancos como Banorte o Santander, estas ubicaciones físicas serán un complemento para aquellos que deseen realizar servicios bancarios, así como para aquellos que aún no han adoptado la transformación tecnológica.
Recientemente, Hey Banco inauguró una tienda en la Ciudad de México donde sus usuarios pueden comprar artículos de la institución, obtener tarjetas de crédito o débito personalizadas, entre otras actividades.
Manuel Rivero explicó que, aunque no se trate de una sucursal bancaria tradicional en la que las personas puedan realizar transacciones en un cajero o realizar trámites, los clientes pueden recibir orientación y hacer recomendaciones de servicio.
