El celular en la nube y comunitario en África.

Aquí el periodista Ricardo Samertband da una buena explicación de lo que significa un teléfono que funciona más como un servicio en si mismo y de forma comunitaria (de ahora en adelante el texto es de él):

El continente africano es muy interesante en lo que tiene que ver con la telefonía celular, porque el acercamiento a esta tecnología es bastante diferente de lo que vemos normalmente en una ciudad como Buenos Aires, y eso hace que a veces surjan ideas y conceptos inusuales.

Una infraestructura deficiente y una población empobrecida hacen que el foco de atención no esté en el último iPhone o en cuánto tardaremos en tener móviles con LTE (la tecnología de banda ancha móvil que sucede al 3G). Más bien, el celular se transforma no sólo en un locutorio (típicamente, el móvil es de la aldea o de un hombre fuerte de la zona, antes que un elemento personal).

También es un sistema bancario (denominado Sente) en el que se transfiere dinero de una persona a otra (o de un pueblo a otro) en la forma de crédito para llamadas. Hoy está estandarizado en M-Pesa, un servicio que opera en varios países africanos.

La primera vez que escuché este concepto fue de la boca de Jan Chipchase, un antropólogo inglés que trabajaba para Nokia recorriendo el mundo (sobre todo Africa y Oriente) y documentando todo en su excelente sitio. Ahora hace lo mismo para Frog Design (una compañía de diseño conocida por ejemplo, haber colaborado con Apple en su época clásica).

Justamente, Frog y Movirtu, una operadora africana, anunciaron en marzo un concepto genial, MXShare, que es básicamente el teléfono en la Nube, y que es lo que publicó CNN esta semana. Acá tienen la descripción en el sitio oficial.

En un contexto en el que el teléfono celular se usa casi al revés del resto del mundo (no es un dispositivo ultra personal, sino comunitario), lo que proponen en Movirtu es tener un dispositivo multi usuario. Un usuario compra el acceso al servicio (mucho más económico que el más barato de los teléfonos) y obtiene un usuario, contraseña y número de teléfono. Después, basta que tenga acceso a un móvil de esa operadora (por ejemplo, pidiéndolo prestado) y puede hacer llamadas, revisar su buzón de correo, su casilla de SMS, etcétera.

En un punto es parecido a como funciona, por ejemplo, Android (en el que con una cuenta de Gmail toda la información básica se transfiere al teléfono), pero con las obvias salvedades del caso. Por suerte buena parte de la población argentina está lejos de algo así, pero de cualquier manera es un concepto para pensar: la idea de que el teléfono es simplemente una puerta de acceso a una serie de servicios, algo que será cada vez más importante (y atractivo) en la medida en que tengamos cada vez más servicios asociados a nuestra identidad online. Y el anuncio de Facebook de ayer (ser el identificador universal en la PC y el móvil) apunta directamente a eso mismo.

Piensen en la cantidad de teléfonos móviles que probablemente tendrán a lo largo de sus vidas (sobre todo los jóvenes) y en lo cómodo que sería sólo tener que ingresar un usuario y una contraseña para tener toda la información a mano, sincronizada en un servidor remoto al estilo del difunto Kin (contactos, SMS, e-mail, fotos, etcétera); es algo que ya está disponible en parte en los smartphones más modernos, pero esto abarcaría a todo el mercado, con la información lista para ser recuperada si cambiamos el teléfono, se rompe, se extravía o nos quedamos sin batería y le tenemos que pedir uno prestado a un amigo para seguir comunicados con el mundo.

Y no lo piensen sólo para un móvil económico; la ideal del móvil relativamente sencillo que delega en la Nube toda la tarea computacional más pesada (desde procesar juegos y videos a cosas más sencillas como adaptar un sitio Web complejo a la pantalla del teléfono) ya está en la mira de uno de los mercados móviles más avanzados, el de Japón. La diferencia, claro, es que ahí la conexión permanente y confiable a Internet, crucial para este concepto, es algo normal.

Extraído de  Movilsur