Nuevo material promete enfriar centros de datos con menor costo energético
Los centros de datos están en el centro de atención, a medida que aumenta la demanda de procesamiento y almacenamiento de datos, mantener estos servidores a temperaturas seguras se ha convertido en una tarea cada vez más costosa y demandante en términos de energía.
Sin embargo, investigadores de la Universidad de Texas podrían tener una solución revolucionaria: un nuevo material de interfaz térmica capaz de disipar el calor de los procesadores de manera más eficiente que las tecnologías líderes actuales.
Una innovación basada en mecanoquímica
Este material innovador combina una aleación de metal líquido llamada Galinstan con nitruro de aluminio cerámico, utilizando un proceso de ingeniería mecanoquímica.
Según las pruebas de laboratorio, superó a los mejores productos comerciales de refrigeración con metal líquido en un asombroso 56-72%. Este avance permitió disipar hasta 2,760 vatios de calor en un área de tan solo 16 centímetros cuadrados.
El secreto radica en cómo se mezclan los componentes. A través de un proceso controlado, se generan interfaces de gradiente que maximizan la transferencia de calor, cerrando la brecha entre los límites teóricos de estos materiales y el rendimiento real en aplicaciones prácticas.
Un impacto significativo en la eficiencia energética
Los sistemas de refrigeración representan aproximadamente el 40% del consumo energético total de los centros de datos, equivalente a 8 teravatios-hora anuales.
Este nuevo material no solo mejora el rendimiento térmico, sino que también permite reducir hasta un 65% la energía necesaria para operar bombas y ventiladores de enfriamiento. Además, abre la posibilidad de aumentar la densidad de procesadores sin riesgos de sobrecalentamiento.
Se estima que esta tecnología podría reducir en un 13% el consumo energético de refrigeración en toda la industria, disminuyendo en al menos un 5% el uso total de energía de los centros de datos. Este avance no solo implica menores costos operativos, sino también una significativa reducción de las emisiones de carbono.
¿Cuándo estará disponible esta tecnología?
Aunque el material ha demostrado su eficacia a pequeña escala en laboratorio, aún no está listo para el mercado. El equipo de la Universidad de Texas trabaja en la producción de lotes más grandes para realizar pruebas en entornos reales junto con socios de la industria.
Por lo tanto, es probable que esta grasa térmica de metal líquido llegue primero a los centros de datos antes de estar disponible para aplicaciones domésticas.
Guihua Yu, profesor en la Escuela de Ingeniería Cockrell y el Instituto de Materiales de Texas, destacó:
El consumo de energía para sistemas de enfriamiento en centros de datos y otros equipos electrónicos grandes está aumentando rápidamente. Este material que hemos creado podría ser clave para abordar esta tendencia.
Fuente: Nature Nanotechnology