El Indium y su uso en las baterías para automóviles, carga rápida y mayor almacenamiento
Aún no conocemos el alcance de los vehículos eléctricos.
En los últimos años, los avances en tecnología eléctrica han resultado en la creación de baterías de alta capacidad, permitiendo que los coches eléctricos alcancen autonomías superiores a los 500 kilómetros en carretera.
Baterías y su uso en automóviles
Estas cifras prometedoras deberían disipar la conocida ansiedad de rango que ha sido históricamente el principal obstáculo de esta tecnología, además del coste de adquisición de los vehículos.
A pesar de las mejoras, las grandes capacidades de las baterías conllevan tiempos de recarga prolongados, y hasta el momento, la infraestructura de recarga disponible no ha logrado abordar este desafío.
Se prevé que los cargadores se vuelvan más eficientes y abundantes, lo que eventualmente permitirá recargar un coche en un tiempo comparable al necesario para llenar un tanque de gasolina.
El problema de las baterías: el desgaste
Sin embargo, esta carga rápida también presenta un problema: la degradación de la batería a causa de la alta potencia de carga. Para abordar estos desafíos, investigadores de Cornell en Estados Unidos han estado trabajando en una solución integral.
Un nuevo componente de la tabla periódica promete revolucionar las ‘superbaterías’ del futuro. Numerosas investigaciones se centran en desarrollar baterías de litio que superen las limitaciones actuales, abordando tres problemáticas clave y siendo económicamente viables.
La combinación de carga ultrarrápida y mínima degradación no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también hace que los vehículos eléctricos sean más atractivos y competitivos en el mercado.
Carga rápida y mayor almacenamiento con el Indium
Aunque las baterías de litio son conocidas por su ligereza, fiabilidad y relativa eficiencia energética, su principal desafío reside en la velocidad de carga. Estas baterías están limitadas en su capacidad para gestionar grandes picos de corriente, lo que ha sido un obstáculo significativo en su avance tecnológico.
En esta investigación, los científicos han identificado el indio como un material con potencial para el desarrollo de baterías de carga rápida. El Indio (Indium), reconocido por su naturaleza blanda, se utiliza comúnmente en la producción de recubrimientos de óxido de indio y estaño, que encuentran aplicación en pantallas táctiles y paneles solares, entre otros usos.
Presenta dos características que incrementan su potencial como ánodo de batería: una barrera de energía de migración excepcionalmente baja, que regula la velocidad de difusión de iones en estado sólido, y una densidad de corriente de intercambio moderada, asociada con la rapidez de reducción de los iones en el ánodo.
La combinación de estas propiedades, que se caracteriza por una difusión veloz y una cinética de reacción superficial más pausada, resulta crucial para lograr una carga rápida y un almacenamiento de energía de larga duración.