Algunos satélites de SpaceX están cayendo a la Tierra
Elon Musk enfrenta una serie de problemas. A su desafortunada gestión en Twitter y su pérdida del título de hombre más rico del mundo, se suma ahora un nuevo obstáculo: algunos de los nuevos satélites Starlink de su empresa SpaceX están cayendo a la Tierra.
Problemas en satélites de Starlink
Hace apenas un mes, SpaceX lanzó 21 versiones en miniatura de sus satélites Starlink de última generación, pero parece que uno de ellos no logró mantenerse en órbita.
Según un informe de Gizmodo, el satélite Starlink con el número de identificación 30062 entró en la atmósfera terrestre el lunes a las 4:50 a.m. ET frente a la costa de California y se presume que se quemó durante su reentrada.
Jonathan McDowell, astrofísico del Harvard-Smithsonian que monitorea los satélites de Internet de SpaceX, tuiteó sobre el evento. McDowell también informó en Twitter que tres de los satélites Starlink V2 Minis estaban elevando su altitud en un intento por alcanzar sus órbitas operativas designadas, mientras que uno se sometió a una maniobra controlada de desorbitación.
Starlink V2 Minis
Varias personas, incluyendo a la guía no oficial de SpaceX Starlink Insider, han estado siguiendo la trayectoria de los V2 Minis desde su lanzamiento y observaron la trayectoria de desorbitación del satélite antes de su reentrada.
El mes pasado, Starlink Insider fue uno de los primeros en notar que el conjunto de satélites recién lanzados estaba descendiendo lentamente en lugar de elevarse.
Ante las especulaciones sobre el estado de los V2 Mini, el CEO de SpaceX, Elon Musk, acudió a Twitter para aclarar que los satélites estaban “experimentando algunos problemas” y que algunos de ellos serían desorbitados mientras que otros seguirían sometiéndose a pruebas.
El 27 de febrero, SpaceX lanzó 21 satélites Starlink de nueva generación a bordo del cohete Falcon 9. Estos satélites, conocidos como V2 Minis, son versiones miniaturizadas de la próxima generación de Starlinks.
Su objetivo es ayudar a SpaceX a aumentar la capacidad de su megaconstelación de Internet y satisfacer la creciente demanda de Starlink hasta que la empresa pueda lanzar lotes de sus satélites de tamaño completo de nueva generación.
Para lograr su objetivo, SpaceX necesita hacer volar su cohete de carga pesada Starship. El cohete Falcon 9 que actualmente está en uso no está diseñado para transportar los satélites de nueva generación, lo que llevó a SpaceX a crear las versiones en miniatura.
Tesla tenía previsto lanzar un segundo lote de V2 Minis el mes pasado, pero no está claro en qué etapa se encuentran los satélites en miniatura de SpaceX.
Starlink tiene la meta de tener alrededor de 12,000 satélites en órbita y permitir que los usuarios paguen una mensualidad para conectarse desde cualquier lugar con su propio dispositivo. La intención no es competir con la fibra óptica o las conexiones 5G, sino complementar ambas ofertas con su propio servicio.