Tejidos Humanos vVascularizados: la nueva frontera de la Bioimpresión 3D
Un equipo de investigación de la Universidad de California en San Diego está desarrollando una nueva forma de impresión 3D llamada “DLP“, que utiliza luz digital para crear tejidos de ingeniería 3D vascularizados.
Estos tejidos son similares a los humanos, pero están hechos de células vivas y estructuras de biomateriales y obviamente, su objetivo es crear tejidos funcionales. El estudio experimental fue publicado en Science Advances y explica cómo los investigadores abordaron con éxito uno de los tipos más prometedores de impresión 3D con materiales biocompatibles. La impresión 3D DLP es una tecnología ampliamente utilizada en el sector médico y tiene un gran potencial para aplicaciones biomédicas, como el desarrollo de medicamentos, trasplantes de órganos y la medicina regenerativa y personalizada.
Imprimiendo Tejidos Humanos
Un equipo de nano-ingenieros ha desarrollado un sistema de bioimpresión 3D para crear tejidos humanos vascularizados. La tecnología patentada se basa en la superposición de capas de células y biopolímeros para crear estructuras y tejidos biológicos. Para lograr una alta resolución en la impresión, los investigadores utilizaron un polímero biocompatible que reduce el efecto de dispersión de la luz, lo que les permitió imprimir con altas densidades celulares y alta resolución. Para ello, los investigadores utilizaron un agente de contraste llamado “iodixanol“que fue utilizado como ingrediente en la biotinta para lograr este objetivo.
Después de ajustar el índice de refracción de la biotinta para minimizar la dispersión de luz, el equipo lleva a cabo un proceso complejo de impresión en capas para construir el modelo. Utilizaron una biotinta de metacrilato de gelatina (GelMA) con un índice de refracción coincidente para lograr un tamaño de característica de 50 µm y una densidad celular de hasta 0,1 mil millones/mL.
Después de la impresión, las células se cultivan para permitir que maduren o se reorganicen en un tejido funcional. El profesor Shaochen Chen, líder del proyecto, explica que cada tipo de célula tiene una densidad específica en la que son más potentes para crecer, como una semilla. Este avance podría llevar a la producción de tejidos y órganos personalizados para pacientes, lo que podría transformar la medicina regenerativa.
La tecnología de bioimpresión 3D desarrollada por el equipo de la Escuela Jacobs podría mejorar el desarrollo de fármacos, mitigar los desafíos de la escasez de donantes de órganos y reducir el riesgo de rechazo inmunitario en trasplantes de órganos. Además, en un futuro próximo, esta tecnología podría permitir el desarrollo de modelos de tejido in vitro de alta densidad celular, lo que tendría un gran impacto en la medicina regenerativa.