Científicos utilizan material con células vivas para imprimir un corazón en 3D
La impresión 3D tiene aplicaciones más allá de la creación de objetos, ya que un grupo de científicos de la Universidad de Stanford está explorando técnicas avanzadas para imprimir órganos humanos.
Impresión 3D para todos
La tecnología de impresión 3D ha estado presente durante varias décadas, sin embargo, solo en los últimos años ha sido accesible para el público en general. Actualmente, es posible adquirir una impresora 3D de calidad por poco más de $3,000 MXN, lo que nos permite recrear diseños con facilidad.
Esta es una tecnología versátil que ofrece una amplia variedad de aplicaciones, y su potencial sigue siendo descubierto día a día. Aunque la impresión 3D se utiliza principalmente para crear modelos 3D con filamentos de PLA o plástico ABS, hay muchas más opciones disponibles.
Se han desarrollado filamentos que contienen partículas de madera, y también se ha logrado imprimir en 3D con metales. Pero si eso no es suficientemente impresionante, hay que destacar que la impresión 3D también se está utilizando para crear órganos artificiales.
Nuevos materiales y usos
Desde hace tiempo, se han estado experimentando con distintos métodos y materiales flexibles que imitan el tejido de órganos humanos reales. Con el paso del tiempo, se han logrado avances significativos en el uso de la impresión 3D biocompatible.
Un grupo de científicos de la Universidad de Stanford ha llevado a cabo una investigación que muestra cómo han logrado crear tejidos humanos a gran escala, en lugar de limitarse a generar una capa fina de células en una placa Petri. El principal desafío al recrear tejido humano en el laboratorio es que solo se puede crear una capa delgada de células.
Sin embargo, con este nuevo método que utiliza la impresión 3D, se pueden crear tejidos más gruesos con diseños complejos, como los órganos. De hecho, en un video publicado por Stanford, se muestra cómo están trabajando en la creación de un corazón impreso en 3D.
Impresión 3D para fines médicos
El material utilizado no es una resina, sino un material biocompatible flexible que contiene células vivas en su interior. El equipo de investigadores de Stanford utiliza organoides, células madre modificadas en el laboratorio, para construir capa a capa órganos mediante el método de impresión 3D.
Aunque la idea y la metodología han sido establecidas y se ha demostrado su eficacia, todavía hay muchos obstáculos que impiden que sea posible lograr este objetivo. En primer lugar, recrear un órgano humano como el corazón es muy complicado, ya que contiene más de 10.000 millones de células y más de dos docenas de tipos de células.
Además de recrear el órgano en 3D, tendrían que asegurarse de que sea funcional y pueda ser utilizado en pacientes. Hasta el momento, han logrado construir una estructura tubular de 5 cm de largo y medio centímetro de diámetro que puede bombear, contrayéndose y expandiéndose para mover el fluido a través de él.
Aún queda mucho por hacer para alcanzar el objetivo de crear órganos humanos en 3D, esperan seguir trabajando para lograrlo en un futuro cercano.