Desembarco eléctrico, China envía flota con medio millón de autos a Europa
2024 comenzó con un hito para China: desbancar a Japón como líder mundial en exportaciones de autos.
Giro inesperado: la flota china se hace a la mar
Un logro que parecía pender de un hilo cuando, semanas antes, los tres principales fabricantes chinos enfrentaron un obstáculo crucial: la escasez de transportistas marítimos para sus vehículos.
Sin embargo, en solo cuatro meses, el panorama ha dado un vuelco rotundo. Los tres gigantes automotrices chinos – BYD, SAIC y Chery – han conseguido asegurar barcos transportadores, renovando la flota de las grandes navieras especializadas.
Estos “Car Carriers”, con una imponente eslora de más de 200 metros, ya ostentan las insignias de las marcas chinas.
El primer desembarco y la promesa de más por venir
El BYD Explorer 1, cargado con 5.000 unidades de la marca, ha sido el primero en llegar al puerto alemán de Bremen. A su capacidad total de 7.000 unidades, le siguen el SAIC Anji Sincerity con 3.700 unidades y, próximamente, el barco de Chery.
Qian Renjie, del Centro de Investigación Automotriz de Duisburgo, anticipa que esto es solo el comienzo: “Las tres grandes marcas asiáticas esperan contar con una flota de ocho barcos en los próximos dos años, lo que significa 168.000 autos eléctricos por barco y por año, ¡un total de más de medio millón!”.
Los fabricantes chinos no se ven intimidados por los aranceles aduaneros que Bruselas planea imponer. Consideran este costo adicional, de alrededor de $1.000 por vehículo, como una inversión necesaria.
Acuerdos estratégicos y aranceles: desafíos superados
Tina Aller Heiligen, portavoz de BLG Logistics, operador de la terminal de automóviles en Bremen, no prevé una avalancha inmediata de autos chinos, pero sí un aumento sostenido en las importaciones.
La clave reside en la red de concesionarios que las marcas chinas han establecido o con las que se han aliado, permitiéndoles darse a conocer y consolidar su presencia en el mercado europeo.
Esta llegada masiva de autos eléctricos chinos a Europa marca un nuevo capítulo en la industria automotriz. La capacidad de producción y la estrategia comercial de estos fabricantes asiáticos los posicionan como actores clave en la transición hacia una movilidad más sostenible.